De qué nos perdimos al momento de orar?, parte 2
Orar ha sido una de esas enigmas que casi todas las personas tienen, ya que todos se cuestionan si lo hacen adecuadamente y muchos desearían salir de ese lugar con una respuesta, lamentablemente muchas de esas personas consideran como respuesta solamente un “si” un “no” ó un “tengo algo mejor para ti”, pero si no
De qué nos perdimos al momento de orar?
En muchas ocasiones nos hemos preguntado si lo que oramos es correcto ó simplemente si la manera en la que lo hacemos es la adecuada, y sabe, muchas veces no tiene que ver con el hecho de que sea ó no correcta la manera ni lo que oramos, sino verdaderamente el objetivo de nuestra oración,
El cambio y la transformación son diferentes
Muchas personas creen que por el hecho de acercarse a Dios tienen que “cambiar”, es decir, como si de pronto tuvieran que dejar de ser quienes son y convertirse en alguien más, solo porque ahora decidieron ser ‘buenas personas”, pero en realidad las cosas no funcionan así, ni Dios quiere cambiarnos, ni tenemos que ser
Entre la oración y la verdadera intimidad
En ocasiones hacemos de nuestra oración una interminable serie de repeticiones que en realidad no contienen ni sentido ni fe, porque en realidad no sabemos si Dios responderá como esperamos a lo que pedimos, sino solo sabemos que queremos ó necesitamos aquello que hemos llevado a aquel lugar que entendemos como la presencia de Dios.
Para que sobre y abunde
A veces nos es necesario el preguntarnos para qué es que oramos, ya que normalmente pasamos nuestro tiempo al que llamamos de intimidad con Dios pidiendo acerca de las cosas que nos acontecen en el día a día y sin darnos cuenta estamos más conscientes de lo que nos acontece que de la identidad de
Orando en la dimensión de Dios
Una de las cosas que más seguido suelo escuchar es a personas quejarse de que Dios no responde su oración, que piden y piden y a pesar de que aseguran tener fe, no logran que Dios responda sus ruegos y muchos se preguntan porqué. La respuesta es más sencilla de lo que nos imaginamos, la
Porque en realidad, viene desde adentro
Obviamente no puedo generalizar, pero puedo hablar de la experiencia, tanto de la propia, como de las muchas personas que he tenido el privilegio y gusto de aconsejar y he observado que las personas hablan a Dios en su oración normalmente como a alguien que no se encuentra presente ó bien con alguien con quien
Verdaderamente agradecidos
Por alguna razón las personas confunden su tiempo de oración con el ir a pedir cosas a Dios, luego, cuando se dan cuenta de esto, el sentimiento de culpabilidad les invade y empiezan a dar gracias durante el tiempo que dedican a Dios y sucede que empiezan a dar gracias por cualquier cosa, la vida,
Inspirada para nosotros, parte 7
A veces puede ser preocupante como algunas personas se distraen de su fe pensando en cosas que a lo mejor pueden ser y arman teorías dentro de su cabeza que no tienen nada que ver con la voluntad de Dios y es justo entonces que por así decirlo lo culpan de las cosas que no
Inspirada para nosotros, parte 6
Yo creo que una de las preguntas más comunes que las personas se hacen, es el cuál es la fórmula para desatar el favor de Dios en sus vidas y todo el tiempo buscan hacer cosas ó ciertas acciones repetitivas para poder replicar las cosas que pareciera que Dios les respondió en alguna ocasión. La
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