Día a día estoy mas convencido de que aun me falta mucho por caminar en Cristo, pero también he descubierto que la mayoría de las personas buscamos el favor de Dios de una manera pasiva, es decir, muchos no ni siquiera se atreven a orar en voz alta o separar un tiempo para pasar con Dios mas sin embargo se molestan e incluso le reclaman cuando las cosas no suceden de esta manera.
La cita de hoy nos enseña que Cristo mismo nos dejo tarea, nos dejo un recordatorio de lo que hizo por nosotros y que participásemos activamente de el mismo, a que cada vez que podamos tomemos el pan y recordemos que El dio su vida por nosotros y esto no significa poner una cara solemne y pasar un momento en oración, por el contrario es mucho mas que eso, es el poner una sonrisa en nuestros labios y caminar consientes de que alguien dio la vida por nosotros y debemos de ser agradecidos por ello y cuidar ese regalo precioso que nos fue dado.
Imagino que tanto usted como yo no somos dignos de estar delante de Dios ni recibiendo su favor, pero alégrese, no es por usted sino por El que lo recibimos, así que cambie su actitud, y aprendamos a comportarnos como hijos de Dios, en todos los sentidos, que se note en nuestros actos y no en nuestras palabras, que nuestro testimonio sea visible y que podamos compartir con muchos lo que Dios hace diario en nuestras vidas.