Me encanta que cada vez que pienso que sé algo acerca de Dios éste me hace saber lo mucho que me falta, pero a su vez me enriquece con su profundo conocimiento y me hace parte de la revelación de su Reino y de su voluntad.
A lo largo de la historia del hombre, éste ha buscado el estar bien y cuando todo falla, recurre a Dios a quien de alguna manera trata constantemente de “sobornar” para intercambiar “buenas acciones” a cambio de favores, tranquilidad y abundancia (económica por lo general), otra de las cosas que constantemente intenta es asegurar su lugar en el cielo, para poder vivir el resto de su vida de manera despreocupada, le suena alguna de estas situaciones?
Lo interesante de esto es que a lo largo de esta misma historia, se han levantado muchos que han creado grupos, iglesias e incluso sectas que les dicen a las personas qué cosas tienen que hacer para obtener todo esto que buscan y les hacen creer que es voluntad de Dios y que con ello obtendrán aquello que busca ó que necesitan.
En realidad admiro a estas personas, pues deben de ser muy creativas para inventar nuevas cosas cada vez que las personas que hicieron todo lo que les indicaron hacer, vienen a reclamar que no recibieron lo que esperaban, lo ha pensado?
Pero como le decía, me emociona el hecho que Dios quien vive en una dimensión de tiempo completamente ajeno al nuestro ya sabía todo esto y es por eso que nos dejó por escrito un manual detallado para todas estas situaciones y no solo para que no nos dejáramos engañar por otros, sino para que ni siquiera tuviésemos la necesidad de andar buscando que hacer para hacerle “manita de puerco” como comúnmente decimos en México a Dios para que responda nuestra oración.
Note como la cita de hoy dice que Abraham no fue acepto delante de Dios por las buenas acciones que hizo, sino simplemente por el hecho de que le creyó a Dios y nada más, pero que hay de todas esas personas que andan por ahí consultando a mediums, las cartas y hechiceros para consultar su futuro ó las cosas que les deparará el destino, siendo que en la palabra de Dios no solo está escrito lo que nos habrá de pasar, sino hay una garantía de que así sucederá, pues Dios nos asegura que es fiel a su palabra por tal, solo debemos de conocerla (a la palabra de Dios) y creerla, y listo, no hay otra cosa que tengamos que hacer, y con ello seremos llamados justos (eso dice en los siguientes versículos de esta palabra) y con ello tenemos la garantía de hacer oraciones poderosas según Santiago 5:16.
Lo mejor del asunto es que todo esto es gratis, pues el único precio que hubo que pagar fue la sangre de Cristo, algo demasiado valioso como para que lo entendamos y lo contabilicemos, pero el que cree, se hace objeto de la sangre y con ello tiene acceso al Reino entero, a causa de la justicia que nos regala el creer, cómo ve?