Es interesante el concepto que cada persona tiene acerca de la bendición, porque normalmente las personas tienen la idea de que la bendición es algo que sucede después de que oramos y es algo tangible, más como una respuesta que como algo que viene de Dios.

De hecho, las personas curiosamente catalogan las bendiciones como algo material ó algo físico y no como algo espiritual, y es porque normalmente su oración normalmente es acerca de estos temas, acerca de cosas materiales y físicas y no acerca de cosas espirituales, y tiene que ver con la dificultad de las personas de verse a sí mismas hechas a la imagen de Dios y con la capacidad de expresar su naturaleza, de hecho a veces ni siquiera les interesa esa parte.

La verdad es que la bendición tiene que ver con el hecho de que Dios habla acerca de nosotros y pone en nosotros capacidades especiales, para que seamos nosotros los que hagamos y creemos cosas y no que sea Él quien las haga, piénselo detenidamente, Él ya hizo todo lo que tenía que hacer, Él ya murió en la cruz por usted y por mi y resucitó según su promesa, por tanto ahora la estafeta está en nuestras manos y es ahora que debemos de actuar de acuerdo a lo que la Biblia habla acerca de nosotros.

Es sencillo, se ha puesto a pensar acerca de la famosa frase de reza “ya no vivimos bajo la ley, sino bajo la gracia”? (Rom 6:14), esta trata no acerca de que ya no debemos de cumplir los mandamientos del antiguo testamento, sino del hecho de que hemos sido provistos con un espíritu el cual nos da como parte de su uso un dominio propio para poder dejar de pecar y ahora poder establecer los principios del Reino de Dios en nosotros, en nuestra vida y en todo lo que nos rodea.

Es cuando tomamos consciencia de esto que empezamos a dejar de ser influenciados por nuestro alrededor y somos nosotros quienes impartamos todo lo que nos rodea, los problemas, las dificultades, las peleas y el mal ambiente deja de de ser un factor que nos afecte y son cosas que empiezan a cambiar a nuestro alrededor a causa de la consciencia de la identidad que tenemos y que nos fue dada en Cristo, y es entonces cuando las cosas se ponen buenas, pues empezamos a caminar en bendición, lejos de andarla correteando de las cosas que nos rodean.

Es por eso que la Biblia nos dice que andamos por fe y no por vista, es más importante que tengamos la consciencia de lo que Dios ha dicho acerca de nosotros y no de lo que veamos, pues si caminamos inspirados y motivados por lo que hay a nuestro alrededor y lo que vemos, lo más probable es que no caminemos en absoluto y nos detengamos justo donde estamos, no lo cree?

Es por eso que me encanta la cita del día de hoy, es acerca del profeta Ezequiel quien fue llevado a un valle lleno de huesos secos, los cuales carecían de vida y los cuales no tenían esperanza, y cualquiera se deprimiría ante este panorama, pero para Ezequiel no fue importante lo que veía, sino lo que Dios dijo, acerca de Ezequiel y acerca de los huesos.

Primeramente Dios preguntó a Ezequiel si él creía que estos huesos podrían vivir de nuevo, a lo que Ezequiel no respondió basado en lo que veía, sino en lo que sabía de su interlocutor, el Creador de vida y su respuesta fue “tu sabes que si”, segundo Ezequiel creyó que había en él la capacidad de regresar estos huesos a la vida, pues Dios le dijo “profetiza sobre estos huesos”, por tanto él hizo como se le dijo y levantó de un gran valle de huesos secos un gran ejercito.

Ojo!, esto es importante, no levantó huesos para hacer humanos felices, profetizó sobre los huesos para levantar un gran ejercito, es decir, todo lo que hace Dios, tiene un propósito poderoso, si su oración es acerca de cosas triviales y sin un fin en el Reino de los Cielos, pierde usted su tiempo de oración y no hace mas que pedir cosas inútiles que lo mas probable es que no sucedan.

Por tanto es primordial que sepa y tenga consciencia de que su tiempo de oración no es un tiempo “lindo” que pasa con Dios para que usted sienta bonito, el tiempo de intimidad con Dios es un tiempo poderoso, en donde somos instruidos en el carácter de Dios para salir de ahí y expresar el carácter de Dios y hacer las mismas cosas que Él hace y que Yeshúa (Jesús) hizo cuando estuvo entre nosotros.

El tiempo en el que éramos influenciados por nuestro alrededor y las circunstancias pasó, eso es lo que les sucede a los que no creen, este es el tiempo donde la fe se activa y es más importante lo que escuchamos y lo que sabemos de Dios que las cosas que vemos, por tanto quite la vista de las cosas a su alrededor y póngala en su Biblia, que es donde su fe será forjada y será usted preparado y edificado como un verdadero hijo de Dios hecho a su imagen y con la capacidad de expresar su naturaleza.

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