Hace un par de días recibí un correo de un buen amigo que me dejó pensando largo tiempo, el mensaje que me envió contenía la noticia acerca de una persona cercana a el, que tiene algunos años en la lucha contra el cáncer y esta a punto de rendirse, al grado que le dijo a mi amigo: «si Dios dejó a Jesús morir en la cruz, que nos espera a los demás».

Mi amigo me escribió en búsqueda de apoyo ya que no tuvo palabras para responder a esta persona y con la impotencia de darle consuelo, no quisiera haber estado en los zapatos de mi amigo, debe de ser muy difícil estar junto a alguien y quererlo ayudar cuando su propio entendimiento esta centrado en sus fuerzas y pretende culpar a Dios de algo en lo que no le han dado oportunidad de obrar y no tener la respuesta oportuna que no solo haga despertar a esa persona de su engaño y a su vez darle consuelo.

La respuesta es fácil, no es que Dios haya dejado a Jesús morir en la cruz o que lo haya abandonado ahí, sino que aún antes de crearnos, Dios sabía perfectamente que fallaríamos y que necesitaríamos de toda la ayuda posible, por ello, desde antes de la creación del hombre, planeó la cruz para salvarlo y garantizarle vida eterna, es decir, desde siempre ha sido sabido que Jesús tendría que en su calidad de Dios hacer el sacrificio de venir y vivir como hombre para entender el pecado desde el punto de vista del hombre y luego como hombre y como Dios a su vez morir al pecado para poder redimir el pecado de todo hombre por la eternidad.

Lo he mencionado muchas veces en éste espacio, siempre y cuando tratemos de pensar a Dios como un semejante a nosotros, nos llevará al la inevitable equivocación, y no solo eso, sino que corremos el riesgo de salir lastimados, ya que siempre sospecharemos de El de acuerdo a nuestra naturaleza y siempre estaremos a la expectativa de que nos quede mal y nos traicione, como nosotros lo hacemos con El, cuando en realidad, las cosas son al revés, no es que El pueda ser o sea como nosotros, sino que nosotros podemos llegar a ser como El, podemos imitarle y permitirle usarnos para acercarnos cada día mas a la santidad.

La cita de hoy me emociona, ya que me hace por un lado recordar la vida complicada que llevamos y como es que nos esforzamos tanto por algo que nos es incierto, que que podríamos vivir simple y sencillamente como las aves, sin afanes y con la garantía de que hagamos como ellas y cumplamos aquello para lo que fuimos diseñados, tendremos la provisión en todos los aspectos que necesitamos.

Me llama mucho la atención como es que en programas de Discovery Channel o Natural Geographic hablan de la inteligencia de los animales, yo considero en mi personal opinión que lejos de inteligencia, los animales poseen sabiduría, no es que hagan cosas para sobrevivir, sino que cumplen aquello para lo que fueron creados, no singuen solo su instinto, sino escuchan la voz de Dios y saben que todo lo que hacen le da gloria a El, por ello la cita de hoy nos recuerda que no solo somos mas que las aves, sino que somos escogidos por Dios, de manera que si solo hiciéramos aquello para lo que fuimos creados y diéramos gloria a Dios en todo y con todo lo que hacemos, no tendríamos que sentirnos abandonados por Dios y menos sospechar de El en que reaccione como nosotros reaccionaríamos al no tener nuestras mentes y corazones cautivos en Jesús.

Dios nos dió un lugar especial en su corazón y nos dió a diferencia al resto de su creación la oportunidad de escoger entre hacer el bien y el mal, pero ojo! el mal no solo es cuando dañamos a alguien, la Biblia nos promete que si sabemos hacer aquello que es bueno y no lo hacemos, también nos es contado como pecado, y muchas veces nuestra vida esta mas llena de cosas que no hicimos y sabíamos que debíamos hacer, ello nos llena de culpas, resentimientos, pensamientos negativos que nos llenan de afanes y dejamos de tener la constante presencia de Dios en nuestras vidas y dejamos de cumplir para lo cual fuimos creados, por lo que empezamos a generar en nuestras vidas un cáncer que no es físico, sino espiritual, que no es otra cosa que lo malo en nosotros empiece a comerse lo bueno y acabe con nuestras vidas por falta del cumplimiento de nuestro propósito.

En éste inicio de semana, le invito a lo siguiente, reflexione acerca de la cita de hoy y deje a un lado los falsos sentimientos hacia Dios, entienda y comprenda el lugar especial que Dios le ha dado y tome ventaja de ello y comience a tomar decisiones basadas en la palabra de Dios para que así como las aves viven sin afanes y con abundancia del favor de Dios, lo haga usted también.

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