¿Se ha puesto a pensar que es lo que pasa cuando una casa se incendia?, normalmente lo que sucede es que las personas llaman a los bomberos para que apaguen el fuego, pero el dueño de la casa misma, poca oportunidad tiene de intervenir y apagar el fuego mismo, así también pasa con los médicos, cuando alguien esta enfermo, y mas si el caso es de gravedad, por mas que quisiera uno intervenir en la cirugía de ese ser amado o bien en la de uno mismo, no puede ya que solo el experto que es el medico podrá atenderle de la manera adecuada.

Después de pensar en esto, me queda mas que claro porque es que muchas situaciones no suceden o no se resuelven en nuestra vida, ya que por mucho que le pidamos ayuda a Dios, la verdad es que no le damos oportunidad de actuar con libertad como lo haría un bombero, un medico, o cualquier especialista en su ramo, obvio, si somos especialistas en problemas, mas somos especialistas en meternos en ellos, pero no en resolverlos y podemos hacer que nuestras situación se extienda por largo tiempo y no se resuelva por falta de la intervención divina, pero no porque Dios no actúe, sino porque nosotros no dejamos a Dios actuar.

Le voy a explicar como es que me que lo entiendo yo…

Hay veces que nos comportamos como si tuviéramos un dolor de muelas, y sabemos que tenemos que ir al dentista, y una vez sentamos en la silla del dentista no dejamos de hablar, por un lado quejándonos del dolor y describiéndolo, como por el otro lado sugiriendo al dentista cual sea el procedimiento que debe aplicar en nuestro tratamiento, de manera que nunca le damos oportunidad siquiera de revisarnos porque no dejamos de hablar, es decir, para que el dentista pueda trabajar tienen que suceder 2 cosas, tenemos que callar y tenemos que abrir la boca para darle oportunidad de hacer su trabajo.

La cita de hoy es mas que clara, no tanto del proceso sino del resultado de ello, nos explica que nuestros problemas no solo se resolverán, sino que huirán de nosotros, pero para ello tenemos que pedir ayuda a Dios y darle esa oportunidad de ayudarnos a su manera y no a la nuestra, ya que como dice la cita, Dios esta de nuestra parte, pero con ello dice que esta verdaderamente de nuestra parte, es decir, como necesitamos, mas tal vez no como queramos, ya que puede ser muy distinto.

Al meditar en ello, he identificado varios aspectos de mi vida los cuales me he dado cuenta que no he entregado a Dios plenamente para que actúe en ellos y le quiero invitar, a que como yo haré a lo largo del fin de semana, medite y ore por aquellos aspectos de su vida en los que la solución o la respuesta no ha llegado, haga como en el dentista, cállese, deje de hablar y repetirle a Dios lo que le pasa, El ya lo sabe, abra grande, pero no su boca, sino su corazón, su entendimiento y mas que nada su oído, para que permita que El actúe y le diga que es lo que El va a hacer y como lo hará, de manera que tenga un efecto eterno y no tenga que volver a pasar por esta situación de nuevo jamás, como ve?, esta decidido a terminar sus problemas de una vez por todas?

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