Es asombroso lo difícil que puede ser para nosotros el pasar por una situación solos y lo fácil que es pasar por la misma situación de la mano de Dios, es como estar frente a una salida de emergencia y darnos cuenta que esta cerrada y no darnos cuenta que junto a la puerta hay un botón con un letrero que dice «presione aquí para salir», me gusta pensar que esos letreros son visibles solo a los que buscan salidas permanentes y no solo temporales y fáciles.
Dios amo al hombre desde que lo creo y nos amo a cada uno de nosotros desde que nos dio nombre hace miles de años y puso un medio de comunicación entre ambos (la oración) que es mas efectiva que los celulares y el Internet y mas barata aun, pero lo mejor de todo es que tiene la capacidad de darnos respuesta antes de que terminemos de hacer nuestra petición.
A veces parece difícil el creer que obtenemos respuestas inmediatas a nuestras oraciones, y esto puede tener varios motivos, uno de los mas comunes es que pedimos y pedimos y pedimos y estamos tan enfocados a pedir que no nos damos cuenta que la respuesta ya esta ahi, otra de las razones es que tenemos la mirada fija en una respuesta especifica y no le damos oportunidad a Dios de respondernos con una mejor alternativa y la explicación de la misma.
La cita de hoy es un buen ejemplo de ello, cuando Dios anuncio a Isaías que vendría el salvador, había quienes tenían cientos de años orando por el, cuando llego al mundo estaban tan ocupados esperando por el Mesías que no le vieron cuando le tenían enfrente y le crucificaron ya que les estorbaba en su rutina.
Le invito a reflexionar, ¿cuantas veces ha perdido la oportunidad de disfrutar de la respuesta a su oración por continuar orando?, hoy es un gran día para cerrar nuestras bocas y abrir nuestros oídos espirituales.