La cita de hoy realmente me hizo reflexionar, tuve que mirar atrás en mi propia vida y entender cuantas veces Dios ha estado ahí provocando algo en mi y con mi necedad lo he dejado de hacer, ¿le ha pasado?

La cita de hoy nos enseña que Dios tiene el verdadero deseo de bendecirnos y es capaz aun de poner no solo la voluntad sino también la acción de hacer lo correcto o bien de dejar de hacer lo incorrecto, mas sin embargo en muchas ocasiones le pedimos a Dios que lo haga, que nos ayude a ser mejores, cuando en nuestras mentes tenemos la intención de no cambiar ya que nuestra situación es demasiado cómoda, ¿conoce la sensación?

Conozco de personas que piden a Dios un trabajo y cuando lo tienen, le piden a Dios el tiempo para ir a la iglesia, mas nunca terminan yendo a la iglesia, prefieren conformarse solo con una parte de la bendición, hacen de todas las demás cosas que les rodean sus dioses, ya que estos no les demandan cambiar, solo acciones rutinarias, triste ¿no?

Este día le invitare a hacer lo que haré yo mismo, reflexionare en cada una de las cosas que Dios puso en mi el querer y el hacer y en cuantas lo hice y en cuantas lo rechace, y trabajaré duro en tratar de recuperar lo mas posible, para poder estar al día con Dios y disfrutar de la misericordia renovada de Dios mañana también.

¡Comparte esta entrada, elige tu plataforma!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *