En los antiguos tiempos de la Biblia cuando el pueblo caminaba por el desierto, lo mas probable es que necesitaran de muchas cosas, agua, comida, sombra etc…. y en el libro de números, Dios pide a Moisés que a través del Sacerdote Aarón bendiga al pueblo, y este hace una bendición hermosa que ya hemos usado para este devocional: 
 
Habla a Aarón y a sus hijos y diles: Así bendeciréis a los hijos de Israel, diciéndoles: Jehová te bendiga, y te guarde; Jehová haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; Jehová alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz (Num. 6:23-26)
Lo que mas me llama la atención es que esta bendición que hace al pueblo culmina en paz, siendo que caminaban en el desierto! Y al meditar sobre ello llegue a la siguiente conclusión:
 
La paz permite claridad de pensamiento, permite el tomarse un minuto antes de hacer las cosas y reflexionar sobre nuestras acciones.
 
Por tanto no me extraña que Cristo al estar en este mundo, nos dejara paz, la paz de saber que aun los pecados que no hemos cometido ya han sido perdonados, la paz de saber que no importa que tan grande sea nuestro problema económico, el también pago por el y que aunque no veamos la salida en este momento, tenemos la paz de Cristo de que si tenemos un corazón conforme al de El, nunca nos dejara en vergüenza, la paz para enfrentar el duelo mas grande sabiendo que estamos dentro de la voluntad de Dios y que jamás nuestro dolor será mas grande que el amor de Dios para nosotros y para saber que es en el momento del dolor donde mas debemos de buscar la paz de Cristo.
 
Para muchos la paz es el estar en armonía con todos, el estar en un lugar libre de problemas, deudas o disgustos, para los que amamos a Cristo es completamente lo contrario, la paz es no tener temor en medio de la tormenta, es el tener fuerza para enfrentar la adversidad, es el tener la seguridad de que cuando todos dicen que no, hay un Dios que solo a nosotros en la intimidad que dice que si.
 
Reciba paz, créale a Dios, si lo escribió en la Biblia fue para asegurarse que lo leyéramos y tuviéramos la seguridad de que así seria.

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