El día de hoy conocí a una persona con una actitud muy especial, joven, atrevido y sin miedo al futuro, esta a punto de emprender un gran negocio y esta 100% confiado en su capacidad de hacer negocios y la visión que tiene al respecto.
Entre mas platicaba con el mas me daba cuenta que no tenia una real consciencia de lo que Dios había puesto en sus manos y que no estaba dispuesto a compartir créditos con El.
Y al pensar en esto me puse a reflexionar, ¿cuantas cosas en nuestra vida creemos que son hechas por nosotros y no estamos dispuestos a compartir créditos con el que realmente nos dio los medios para hacerlo?
La cita del día de hoy, aunque no habla en especifico de una situación similar, nos recuerda que somos falibles, y que a su ves podemos ser frágiles, por que aunque somos portadores de la gloria de Dios, esta nunca deja de ser de El, o mas bien nunca debe de dejar de ser de El.
Reflexione y póngase a pensar en cuantas cosas no ha puesto en manos de Dios o no le ha dado honra y cree que tienen que ver solo con usted, haga un acto de reconocimiento y de honra al único que le corresponde y experimente la bendición de ser hijo del padre y compartir su gloria, pero por misericordia y no por atribución.
Le deseo un día y una vida llena de victorias compartidas en misericordia.