¿Alguna vez ha visto la reacción de un niño cuando rompe algo? ¿aún cuando nadie lo ha visto?, se que en este momento se ha de estar sonriendo, creo que todos hemos pasado esa sensación de culpabilidad en la que en cualquier momento sentimos que el más mínimo movimiento nos delatará.

Lo más interesante es que cuando no nos sentimos 100% a cuentas con Dios nos sucede de la misma manera que a los niños, nos sentimos culpables así como lo cita la palabra de hoy, y no nos acercamos a Dios por que no nos sentimos dignos delante de El y preferimos no acercarnos por el momento.
Le voy a confiar un secreto, en el momento que peor se sienta para con Dios, ese es el preciso momento de acercarse a Dios, la Biblia nos enseña que Dios se fortalece en nuestra debilidad y que no tenemos que hacer nada mas que rendirle nuestra vida a El y el hará.
Yo se que puede sonar ilógico, pero eso es lo mejor de tener a alguien como Cristo como nuestro salvador, que en vez de usar su poder como Dios, decidió por amor colgarse en una cruz por nosotros y con ello remediarlo todo, aún esa situación difícil que le hace sentirse indigno para con El.
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