En ocasiones me asombra lo increíblemente creativos que podemos ser como seres humanos, y esto no sé si se ha incrementado con la llegada de las redes sociales ó si simplemente ahora tiene más exposición a causa de las mismas, el hecho es que ahora vemos pasar una serie de mensajes que con mucho respeto voy a llamar “lindos” que hablan de gran sabiduría y valores humanos, pero que en realidad tienen un efecto nulo o limitado, pues nos llevan a pensar cosas lindas, pero no nos llevan a ningún tipo de acción ó cambio, lo ha pensado?
Cuando empecé a escribir acerca de la palabra de Dios e incluso a predicar en ciertos foros alguien muy acertadamente me enseñó que un mensaje que viene de parte de Dios debe de tener 3 elementos esenciales para contener el carácter de Dios y estos son:
-Edificar.- tienen que llevar a las personas a crecer.
-Redargüir.- tienen que confrontar a las personas con la palabra de Dios y no con la opinión de nadie.
-Exhortar.- tiene que llevar a las personas a una acción.
Cuando pienso en esto, puedo entender a qué se refería el autor cuando hablaba de los proverbios en boca de un necio como lo dice la cita de hoy, pues aquel que insiste en decir palabras lindas que no llevan a nada e insistir en esto por encima de buscar la voluntad de Dios, verdaderamente es un necio, no lo cree?
Es por ello que debemos de ser cuidadosos de aquello con lo que nos alimentamos tanto emocional, intelectual como espiritualmente, pues de ello depende la calidad de nuestra vida, el como avanzamos y el rumbo que llevamos.
Esto hace que la cita de hoy sea fascinante, note como hace la comparativa del proverbio con una pierna paralizada, pues una pierna paralizada no le lleva a ningún lugar, solo está ahí y en ocasiones puede ser incluso un estorbo lejos de una ayuda.
De modo que es importante que revisemos aquellos principios bajo los que nos rijamos, pues en ocasiones pretendemos tener razón ante ciertas situaciones porque nos parece correcto ó justo, pero no empata con la sabiduría divina y esto puede hacer que lo que llamamos sabiduría se convierta en necedad y cuidarnos de expresarlos, pues seríamos objeto de la cita del día de hoy.
Piense en esto, Dios es tan vasto que pudo poner en un solo libro una cita que aplique para cualquier situación ya sea buena o difícil una palabra para avalarla, solucionarla e incluso mejorarla, por tanto, por qué habríamos de buscar sabiduría fuera de la Biblia, no lo cree?, todo es cuestión de conocer y creer en el Dios que decimos que amamos.