En muchas ocasiones pedimos cosas a Dios y en realidad vemos imposible el que cumpla nuestra petición por tal decidimos darle una “ayudadita” a Dios e incluimos en nuestra oración las instrucciones de cómo es que Dios debe de proceder para cumplir eso que pedimos, le ha sucedido?
Esto no es algo anormal, es algo que sucede de manera continua y lamentablemente no es otra cosa que una pérdida de tiempo, ya que no es esa la manera que Dios procede, Dios no cumple caprichos y mucho menos sigue instrucciones, Él es el todopoderoso, el que todo lo sabe y quien sabe mejor que nosotros lo que necesitamos.
Lo que nos lleva a un segundo plano, cuando no recibimos lo que pedimos, a pesar de las instrucciones específicas que le dimos a Dios, nos conformamos con la idea de pensar que Dios nos da las cosas que necesitamos y no las cosas que queremos, y tendemos a pensar que Dios tiene algo en fila para nosotros, pero pocas veces nos preocupamos por aquello que pensamos que Dios sabe que necesitamos, y poco nos cuestionamos el hecho de por qué Dios no habría de decírnoslo, lo ha pensado?
Por qué Dios habría de tener planes ocultos para nosotros?, por qué Dios sabe lo que necesitamos y nosotros no?, por qué seguimos pidiendo equivocadamente a un Dios que parece cada vez más ajeno y mas lejano?, que es eso que necesito que no sé?
Si lo pensamos detenidamente, esto que vivimos a diario no esta descrito en la Biblia, por el contrario, continuamente Dios habla con los hombres y mujeres de la Biblia y les revela el futuro para que puedan actuar adecuadamente, nunca se ha puesto a pensar que en ningún pasaje esta mencionado que Abraham pidiera a Dios un hijo?, es más, creo que los hombres y mujeres de la Biblia no pedían, y sabe por qué?, sencillo, ellos escuchaban la voz de Dios, conocían la voluntad de Dios y sabían que así como Dios lo declara, antes de que abramos nuestra boca, Él ya sabe lo que diremos, por tanto, invertían más tiempo en orar (escuchar la voz de Dios) que en pedir.
Ahora bien, el detalle importante es saber que hacer con aquello que Dios nos hable, eso si viene reflejado en la Biblia, pero solemos ignorarlo, cada vez que Dios revelaba algo a los hombres y mujeres de la Biblia, lo siguiente es que estos tenían que hablarlo ellos también, tenían que usar la autoridad que Dios les Dios para posteriormente declarar las cosas que habrían de suceder.
Y esto es muy fácil de entender, si recordamos que fuimos hechos a imagen y semejanza de Dios, tenemos que entender que las cosas que Dios hará por medio de nosotros, las hará de la misma manera que las hace Él, y Él todo lo hizo, todo lo hace y lo seguirá haciendo por medio de su palabra a la cual Él es fiel.
Por tanto, debemos de cuidar nuestra boca, pues es el instrumento que Dios quiere usar en nosotros y la verdadera fuente del poder de Dios, es ahora donde hacen sentido todas las citas de la Biblia que hablan acerca de la boca, como aquella que dice que de una misma fuente no puede salir maldición y bendición, o bien que cuidemos nuestro corazón, ya que de lo que abunda en el, es de lo que hablará nuestra boca.
Podemos entender ahora cuantas oraciones no han obtenido respuesta, por no entenderlas de la manera adecuada y por no utilizar los medios y los canales adecuados, todo lo que Dios espera que hagamos es que funcionemos como Él funciona y que hagamos las cosas como Él las hace, así de sencillo.
Por tanto, en esta serie acerca de gobernar para Dios, debemos de hacer un alto en nuestro caminar y reflexionar acerca de lo que sale de nuestra boca, y también de como esperamos interactuar con Dios, ya que si mantenemos nuestra boca en limpieza y santidad y además de esto nos preocupamos por escuchar la voz de Dios antes de hablar o declarar algo, estaremos siempre al 100% seguros de que todo lo que hablemos será hecho, tal y como sucede cuando Dios habla, y seremos un reflejo de Él en esta tierra y tendremos sus beneficios y su estilo de vida, gobernemos con nuestras palabras e imitemos a Dios para que pueda venir pronto!