Creo que una de las peores cosas que pueden suceder es que alguien pierda el gozo ó la intención de acercarse a Dios por culpa de algún religioso que lo hizo sentir condenado, no lo cree usted?

Es interesante pensar que la mayoría de las personas que van a la iglesia no saben a que van y encima de eso, hacen sentir mal a otras personas porque no van a la iglesia a pesar de que ellas al menos si saben porqué no van, en otras palabras, alguien confundido echa a perder a alguien que su sabe lo que quiere.

Lamentablemente para muchas personas el acercarse a Dios tiene que ver con el hecho de ir a la iglesia, y sin darse cuenta, se involucran con su iglesia local y se les olvida involucrarse con Dios, es decir, empiezan a hacer lo que las demás personas hacen en la iglesia, pero no les consta que eso en realidad agrade a Dios.

Todo esto viene de 2 raíces completamente ajenas que se mezclan sin que lo notemos y que pueden hacer que una persona erre por completo su camino y se lo voy a explicar.

Todas las personas tenemos una necesidad de desarrollar un sentido de pertenencia, por tanto es importante para nosotros que las personas de nuestro alrededor nos vean con buenos ojos, y hasta cierto punto nos aprueben, para poder sentirnos dignos de pertenecer a ese círculo, ya sea en la escuela, en el trabajo, en la iglesia o que sé yo, y es justo ahí donde corremos el riesgo de exponer o ventilar la segunda raíz que nos puede confundir, ya que todos tenemos un anhelo de ser “buenos” y de agradar a Dios, por tanto solemos hacer cosas que otros piensan que están bien o que piensan que agradan a Dios y nos hacen encajar en su círculo.

Lo que más me llama la atención es que todo esto lo hacemos todo el tiempo, pero a su vez, confiamos mas en lo que nos dicen que en lo que pudiera estar escrito, por ejemplo en un trabajo nuevo, preferimos que los compañeros nos orienten, a ir al área de recursos humanos a pedir un manual o una orientación formal, y justo así sucede también con nuestra fe, la mayoría de nuestras acciones tienen su fundamento en lo que alguien nos dijo.

De ese modo, empezamos a hacer una vida de iglesia, que como le he dicho, tiene mas que ver con las personas de la iglesia y las actividades que la iglesia organiza y a veces inventa, que con lo que la Biblia dice, ya que desafortunadamente muchas iglesias y muchas parroquias no promueven la lectura de la Biblia y cuando lo hacen es solo para avalar la enseñanza de la iglesia y no para que las personas crezcan.

Cuando menos nos damos cuenta, las iglesias se han convertido en clubes sociales en donde solo nos juntamos con la gente “buena” y cualquiera que venga de fuera tiene que cambiar su modo y su estilo al nuestro (aunque el nuestro no sea el modo de Dios) para poder encajar y luego les decimos que nosotros no convivimos con “los del mundo”, siendo que la intención de Dios es justamente que alcancemos a los del mundo y los atraigamos a Él y no a las iglesias!!

Por qué digo que no los atraigamos a las iglesias?, porque la iglesia somos nosotros, la iglesia es una función y no una institución, la iglesia es un grupo de personas que se extiende a todo el mundo y que tiene como objetivo el establecer el Reino de Dios y obedecer a Dios y no el hacer enormes edificios y tremendas instituciones para juntarnos y ser todos iguales y juzgar a los demás porque son los hermanos “separados” o son los “del mundo”, siendo que la iglesia no se trata de tener razón, sino de conocer a Dios.

Con esto no le quiero decir que no vaya a la iglesia, no!, el congregarnos y el adorar a Dios como pueblo y en conjunto es un mandato y hay mucha bendición en ello, pero sí mi intención es prevenirle que no quite los ojos del objetivo, para que no por estar en la iglesia se olvide de Dios, no por estar lleno de actividades de la iglesia, se olvide de leer su Biblia (sabía que el 89% de la gente que va a alguna iglesia no lee su Biblia en casa?).

Nuestro objetivo es impactar al mundo, por ello, en la iglesia podemos encontrar instrucción y estrategias de cómo hacerlo, pero no podemos permitir que la iglesia nos aleje del mundo, en ningún lado dice que dejemos a nuestros amigos y a la gente que amamos, sino dice que los ganemos para Jesús, no diciéndoles todo lo que ya no pueden hacer, sino presentándoles a un Dios vivo quien les hablará en la intimidad y transformará sus vidas.

Por tanto le quiero invitar a que tome un tiempo y reflexione acerca de este tema, no será que tiene demasiado tiempo metido en la iglesia y se le ha olvidado ir al mundo a hacer lo que Dios le ha indicado?, o bien será que no se ha acercado a Dios pensando que la iglesia lo va a condenar?, cualquiera de las 2 posiciones son equivocadas, ya que una relación con Dios se trata de Dios y no de las personas a nuestro alrededor, la opinión acerca de nosotros que nos interesa es la de Dios y no la de las demás personas, pero si podemos hacer que nuestra relación con los demás sea cada día mejor por medio de lo que Dios hace en nosotros.

No existe tal cosa como tener una relación con Dios “a nuestro modo” alegando que la iglesia no cumple su función, por mientras usted tome como guía su Biblia y cuide que su iglesia le enseñe sobre la Biblia y no sobre las cosas de la iglesia, cualquier iglesia es buena, mientras tenga bien claro a lo que va, pero no podemos ni dejar de ir a la iglesia, ni podemos dejar de lado nuestro objetivo de impactar al mundo, que le parece?

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2 Comentarios

  1. Juana de Jesus Aceves

    Tiene razón hermoso, en un tiempo me vi abrumada con las actividades eclesiásticas que tenia casi ya un mes que no me deleitaba en casa a solas en su poderosa Palabra, comencé a decir a tales cosas que no para apartar el precioso tiempo de escuchar su voz a través de la lectura bíblica. Bendiciones.

  2. Sergio

    Amén, nuestro objetivó como creyentes es hacer discípulos para Cristo