En ocasiones no nos percatamos de lo equivocado de nuestra relación con Dios, y esto se lo comento, porque yo mismo lo descubro día a día, hemos crecido teniendo una relación con un Dios que nos contaron y haciendo lo que otros nos dicen hacer, cuando en muchas ocasiones, esos mismos que nos lo dicen, no lo hacen, y cuando nos percatamos de esto, lejos de hacer lo correcto, simplemente no hacemos nada, porque no tenemos un marco de referencia para hacerlo, le ha sucedido?, a mi si, y en muchas ocasiones.

Es por eso que durante mucho tiempo me he dedicado a entender los conceptos de Dios y a entender que es lo que significa cada una de esas palabras y de esa citas que muchos nos repiten, para poder entender a Dios y conocer más a aquel del que todos dicen que es bueno, pero pocos tienen constancia, ya que se ha convertido en un Dios lejano y ajeno, siendo que todos lo llaman “Padre”, o aún términos mas cercanos.

Durante años he escuchado la famosa frase de “la oración del justo puede mucho” y siempre me pregunté que es ser justo?, como le hace uno para ser justo?, cual es el parámetro, como se mide la justicia?… y fue cuando me escuché a mi mismo decir la palabra “justicia” que entendí muchas cosas.

Normalmente entendemos por justicia el que cada persona reciba el pago por lo que ha hecho, luego, hay quienes se casan con el concepto de que la justicia es de Dios, lo cual de paso es cierto, pero usamos la palabra justicia como sinónimo de venganza, las personas suelen ser víctimas de algo o de alguien y exigen justicia, y aunque deciden “poner sus asuntos en manos de Dios”, no hacen otra cosa como usar a Dios como su sirviente para que “les haga justicia”, cuando en realidad solo quieren ver a quien les provocó dolor o incomodidad sufrir para estar en igualdad de circunstancias, y a eso le llaman justicia.

Que interesante que el concepto de justicia se ha desvirtuado de tal manera que hemos llegado al punto donde necesitamos de una víctima, para que pueda existir la justicia, wow!, sin víctima no hay justicia!, y a lo mejor usted no está muy de acuerdo con lo que le digo, pero le aseguro a que muchos y la mayoría de quienes nos rodean han llegado al punto de pensar así.

Una cosa nos debe de quedar mas que clara, justicia y venganza son 2 términos que son completamente ajenos, así como lo es el término víctima, este otro no se relaciona tampoco con ninguno de los 2 anteriores, aunque la historia y a veces las circunstancias nos hagan pensar y entender lo contrario, solo habría que ir al diccionario para constatarlo.

Por tanto, me di a la tarea de buscar que significa la justicia desde el punto de vista de Dios, ya que realmente anhelaba llegar a ese punto donde pudiera yo ser llamado justo y pudiera ser objeto de ese poder en mi oración tal y como lo expresaban muchas personas y tal como lo expresa la cita de hoy.

Al asombroso resultado que llegué fue el siguiente, y ponga mucha atención, pues si usted aplica éste concepto en su vida diaria, su oración puede dar un giro tremendo y su vida puede ser transformada por ello.

La justicia no es otra cosa que el cumplimiento de la palabra de Dios, es decir, cada palabra que ha salido de la boca de Dios es un decreto, por tal, cada palabra salida de su boca es verdad y sólo aquel que ha decidido conocer y cumplir esta palabra actúa y vive en verdad, de manera que se convierte en un hombre o una mujer justo, el cual se mueve en los niveles de Dios y su oración no ve lo propio, sino ve lo eterno, por tal su oración refleja su corazón, el cual es habitado por Dios.

Que interesante, no?, que genial saber que la verdadera justicia tiene que ver con el cumplimiento de la palabra de Dios y no con los hombres, eso quiere decir que quien vive en justicia es por un lado alguien que vive por así decirlo blindado contra el mal y con esto no le quiero decir que no le pasen cosas desagradables, sino que vive en una condición en la que su corazón no es afectado por estas cosas y siempre, aun en la desventura, ve el favor de Dios y lo sobrenatural en su vida, no podríamos asegurar que justicia y bendición son sinónimos, pero si que la primera es la llave hacia la segunda, por mientras haya justicia en nuestra vida (cumplimiento de la palabra de Dios), siempre habrá bendición y abundancia de lo prometido en la Biblia para nosotros.

Ahora sí le puedo invitar con conocimiento de causa, a vivir una vida de justicia, donde la justicia no es algo externo y que viene de otros, sino que es algo que nace dentro de usted y que se reproduce en favor y abundancia de parte de Dios, como ve?, se anima a intentarlo?

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