El ser humildes tiene no tiene que ver con el hecho de ser pobres o de no usar cosas costosas, el ser humildes tiene que ver con el hecho de reconocer nuestra dependencia de Dios, y que esta nos llevará a una vida gloriosa, nuestra humildad de reconocer que no fuimos nosotros quienes logramos llegar a ese lugar, sino que Dios nos llevó a el, y eso es lo que asegurará nuestra permanencia ahí.

En el devocional pasado hablábamos de la necesidad que hay de ser pastoreados por Dios y que para ello había que conocerle, reconocer su voz y seguirle sin cuestionar, y creo que esta última parte es la que mas trabajo nos cuesta hacer, el seguir a Dios sin cuestionarle.

Como lo he mencionado en múltiples ocasiones en estas líneas, existe una abismal diferencia entre el orar y el pedir, aunque por lo general las personas tienden a confundir ambas y es ahí donde perdemos nuestro sentido de la humildad y le voy a explicar porqué.

Normalmente cuando nos encontramos en una situación de necesidad, cualesquiera que esta sea, una de las primeras cosas que hacemos después de preocuparnos es acudir a Dios y en nuestra impotencia por resolver esa necesidad, empezamos a imaginar todo tipo de soluciones a la misma y las llevamos a nuestra oración, créalo usted o no, eso es uno de los actos más faltos de humildad que existen, ya que no solo ocupamos nuestro tiempo en la presencia de Dios en pedir, sino que además pretendemos darle instrucciones al Todopoderoso de como hacer las cosas, inaudito no?, lo mas impresionante es que después de que le dijimos a Él como ha de hacer las cosas, coronamos nuestra petición con “hágase tu voluntad”, y nos sorprendemos si las cosas no suceden como pedimos o sugerimos.

La cita de hoy es la segunda parte del famoso Salmo 23, el cual todos hemos recitado en alguna ocasión, pero en realidad pocos conocen y que pocos se han tomado el tiempo de analizar y estudiar, ya que lleva una perfecta secuencia y lógica, si lo entendemos y acatamos en la manera adecuada, podremos llevar una vida sin igual, envidiable, pero que sobre todo refleje a Dios en todo lo que hagamos y aún en lo que tengamos.

Muchas personas suelen consolarse con un “Dios por algo hace las cosas” y en realidad toman lo que les sucede como una segunda alternativa, ya que lo que pedían a Dios era “mejor” o simplemente mas placentero, al no poder influir en ello se conforman con lo que Dios hizo, la cita de hoy nos aclara que la voluntad de Dios es mas importante que nuestra opinión y siempre será mejor, ya que si en realidad nos dejáramos pastorear por el Padre, éste cuidaría de nuestra vida de manera que pudiera asegurar que no sufriéramos y que serán siempre lugares y situaciones de privilegio, de acuerdo a como son las cosas en su Reino y a como debemos reflejar al Dios creador del universo.

Es decir, esto no nos va a evitar que nos puedan suceder cosas difíciles, pero en definitiva nos va a evitar que suframos, es decir, nos va a pasar por cada situación difícil con el entendimiento del propósito y con la mirada puesta en la meta, de manera que el trago amargo sea solo eso un trago amargo y no una situación que nos acompañe.

Note la importante correlación entre el versículo 1 y el versículo 2 del Salmo 23, si Dios es nuestro Pastor, entonces descansaremos en lugares de delicados pastos y seremos pastoreados en aguas de reposo, pero sólo si hacemos de Dios nuestro Pastor, sólo si le seguimos incondicionalmente y sólo si dejamos de darle instrucciones y creernos mas inteligentes que Él, así de simple.

Dios nos ofrece la alternativa de una vida gloriosa y diferenciarnos del resto de las personas, pero es nuestra decisión el batallar y vivir igual que los demás porque según nuestro entendimiento eso nos hace humildes, el ser igual a los demás.

Esta mañana le quiero invitar a que reflexione en ello, piense en todas las ocasiones que lejos de orar, pasó su tiempo en presencia de Dios pidiendo y dándole instrucciones y como cuando hace usted de esa manera, normalmente no sucede como usted pidió o sugirió, sino como Dios siempre supo que era mejor, le invito a que pida a Dios le de un corazón dócil para dejarse pastorear y entrar en la vida gloriosa que la cita de hoy le promete, le parece?

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Un comentario

  1. Susy Padron

    Amen! Que nuestra desesperación no nos aparte de la perfecta voluntad de nuestro Dios, estoy pasando por tiempos dficiles, cambios hormonales que me llevan a un estado de ansiedad, de temor y de angustia,aun en este estado, tomo esta promesa y la hago mia y Dios me ayuda a pasar por esas aguas! Te confieso… No ha sido fácil esta lucha pero se que Dios esta conmigo!
    Recibe un afectuoso saludo y muchas gracias por compartir lo que Dios te ha inspirado… Graciad DIOS por usar a Rene, pido tus bendiciones para él por siempre!