No cabe duda que el Salmo 23 es una de las lecturas mas sencillas pero a su vez mas completas de la Biblia, describen cual es la relación ideal entre el hombre y Dios y podríamos tomar semanas analizando cada parte de esta porción de la Biblia y no terminar, es simplemente emocionante.

La mayoría de las personas recuerdan la parte del principio del Salmo 23, el famoso “El Señor es mi Pastor y nada me faltará”, curiosamente el enfoque que todos damos a esta porción tiene que ver mas con el “nada me faltará” que con el “El Señor es mi Pastor”, siendo que la parte del principio es la mas importante que desata el resto de todos los beneficios y las responsabilidades que implica el tener una relación con Dios.

Hace unas semanas hablaba en la radio acerca de nuestro papel como Reyes en el Reino de los Cielos, ya que la Biblia declara que habremos de ser “Reyes y Sacerdotes” y creo que a la mayoría les queda claro el término Sacerdotes, que no se refiere a la embestidura de la Iglesia Católica, sino al hecho de ser hechos ministros de la palabra de Dios, pero Reyes?, como es que somos Reyes?

Sobre la tierra existen pocas monarquías, pero estoy completamente seguro que Dios ha permitido que permanezcan con la intención de que aprendamos de ellas, muchas personas tienen la falsa idea de que los Reyes están ahí para ser servidos por su pueblo, cuando en realidad es todo lo contrario, ellos están ahí para servir al pueblo, y uno de los mejores ejemplos que existen es la Corona Inglesa, que tiene una Reina que está convencida que fue creada por Dios para servir a los Ingleses y que se ha comprometido a hacerlo hasta el final de sus días a pesar de sus años, su condición física y su propia comodidad, ha sido una mujer que ha sabido servir a su pueblo y engrandecerlo día a día a pesar de las condiciones y situaciones mundiales, es ciertamente digno de admirarse.

El ser Rey tiene que ver con autoridad, pero no autoridad sobre otros, sino autoridad a favor de otros, es decir, en vez de hacer que otros obedezcan a quien es Rey, el Rey usa su poder a favor de beneficiar a quienes sirve, es una gran responsabilidad, y existe una línea muy delgada entre el poder absoluto y su mal uso y el usar el poder a favor de quienes se Reina.

Si lo llevamos a los terrenos espirituales, Dios pone bajo nuestro mando SU Reino de modo que lo administremos y lo engrandezcamos, y esto incluye sus finanzas, Dios no es un Dios pobre por tanto no tendría Reyes pobres, por el contrario, el ser Rey no es solo una actitud (aunque por ahí se empieza), sino que para que haya un Rey tiene que haber un Reino, sin eso no funciona.

Cuando empecemos a entender que aún la abundancia económica es parte del Reino de Dios y que estamos ahí para administrarla, esta empezará a fluir, pues es cuando dejamos de ver las cosas como propias, es que Dios pone en nosotros su confianza para que las administremos.

Justo ayer visitaba a un amigo que me comentaba que su entendimiento era que el acercarse a Dios tenía que ver con la mejoría de su situación económica, y todo lo que le preocupaba era que sus finanzas mejoraran para reflejar el Reino de Dios en su vida, el día que entendió que el objetivo era el Reino y no el dinero, éste segundo empezó a fluir y a traer beneficio a su vida, como nunca antes lo había hecho.

El ser Rey implica el administrar recursos a favor de engrandecerlos, el servir a Dios tiene que ver con el usar el dinero que Él pone en nuestras manos para que su Reino crezca y esto en ocasiones tiene que ver con que ese dinero haga que la iglesia crezca y es ahí donde muchos patinan, pues creen que las Iglesias tienen un interés económico, pero piense esto:

Muchas personas no van a la Iglesia porque tienen miedo de que les pidan o les quiten su dinero, pero cuando tenemos necesidad, al primer lugar que vamos es a la presencia de Dios, irónico no?, cuando tenemos dinero, no queremos que Dios intervenga, pero cuando no lo tenemos, pareciera que Dios tiene la culpa o la responsabilidad de proveerlo!

En la Biblia el aceite se usaba para ungir Reyes, es decir, no se podía ser Rey sin que este hubiera sido ungido con un aceite especial, es decir, un día Dios decidía que un hombre estaba listo para ser Rey y que tenía el entendimiento adecuado para serlo y le declaraba Rey, curiosamente el mismo aceite es el que se usa para sanar heridas a lo largo de la misma Biblia, es decir el ser ungido Rey tiene mucho que ver con la dependencia de Dios, cuando nos entendemos dependientes de Dios es cuando nos pondrá en un lugar de privilegio, que asombroso y que diferente de lo que nos enseña el mundo, no?

Me llama la atención que la Biblia siempre antepone el ser Rey al ser Sacerdote, y como hay mas sacerdotes en la Iglesia que Reyes, hay mas personas dispuestas a hablar de Dios que personas dispuestas a demostrar quien es Dios, si usted se ha preguntado que es lo que Dios espera de usted, es precisamente eso, que sea usted un Rey y que sea un Sacerdote, es decir que se convierta usted en un administrador de su riqueza (la de Dios) y que luego sus palabras reflejen lo que sus actos hacen, como ve? esta dispuesto?

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