El día de ayer platicaba con una buena amiga acerca de donde es que vienen las adicciones y como es que llegamos a caer en ellas, una de las conclusiones a las que llegamos sin tener mucho conocimiento del tema es que muchas personas beben, fuman, toman drogas entre otras cosas buscando desconectarse aunque sea por un momento de su condición actual aún y cuando no sea tan mala, simplemente lo que necesitan es un respiro.

Entiendo que es una tendencia natural del hombre el querer huir de sus problemas y el querer desconectarse por unos momentos, recuerdo cuantas veces lo hice y cuantas veces todo lo que quería era ir a dormir y que cuando despertara todas mis situaciones se hubieran arreglado, le ha pasado?

Lo interesante es que las personas suelen hacer eso un poco mas cuando nunca le han entregado su vida a Cristo, pero las que lo han hecho a veces no se diferencian mucho de las primeras, porque sin conocer quien es Dios, pretenden hacer lo mismo que hacían con las drogas de cualquier tipo con Jesús.

He visto cientos de personas perderse en la alabanza y en la adoración, como si ese tiempo en presencia de Dios les permitiera desconectarse, cuando la Biblia no nos habla de eso, imagínelo de esta manera, que alguien le dijera a usted que tiene una oportunidad de entrar en la presencia de la Reina de Inglaterra y que cuando llegara a ese lugar, simplemente por el gusto de estar ante la presencia de la Reina, se desconectara usted y pretendiera no estar en ese lugar y que frente a ella le empezara a agradecer las cosas que ha hecho por usted y le comenzara a hablar como si no estuviera presente o bien comenzara a llorar sin sentido arrepintiéndose de no se cuantas cosas que ha hecho que le hacen en realidad ser indignos de estar en ese lugar, ahora entiende a lo que me refiero?

Lamentablemente las personas normalmente van a la presencia de Dios solo a pedir cosas, entre ellas paz y un minuto de tranquilidad para sus mentes, para poder seguir a flote, pero olvidan las cosas mas básicas que Dios nos ha indicado para que podamos estar ante Él y disfrutarle como es debido.

En la antigüedad era el Sumo Sacerdote quien se presentaba delante de Dios y tenía que ir escrupulosamente limpio, tanto física, como espiritualmente, sin eso, simplemente moría consumido por la majestad de Dios, obviamente hoy gracias al efecto de la sangre de Jesús ya no tenemos que hacer eso, además de que todos y no unos cuantos tenemos acceso a la presencia, pero sabe, considero que la manera que nos presentamos delante de Él sigue siendo importante, es decir estamos hablando del Creador del Universo y del Rey de Reyes, y no podemos entrar simplemente así y encima de eso con confiancitas hablándole como si fuera nuestro semejante.

Ahora bien, la palabra de Dios nos previene de que nadie debería de presentarse delante de Dios con las manos vacías, es decir no podemos llegar delante de Dios sin nada que ofrecer, y es por eso que tenemos que cuando menos recontar nuestras bendiciones para que podamos tener agradecimiento que suba como olor agradable a Él cuando le veamos.

Por último, escucho todo el tiempo que las personas tienen problemas con escuchar la voz de Dios y por lo general quiero entender que tiene que ver con el hecho de que no es que quieran escuchar la voz de Dios, sino que quieren escuchar una respuesta en específico y al no escucharla, culpan a Dios de no responderle.

Por tanto, si tanto anhelan escuchar la voz de Dios, por qué habrían de perderse o desconectarse en la presencia de Dios?, siendo que son esos pocos momentos en los que estamos verdaderamente en presencia de Dios y deberían de estar todos nuestros sentidos alertas a lo que Dios pudiera querer decirnos.

Hoy es día del Señor, hoy es el día que damos honra y gloria a Dios y hoy es el día que más conscientes deberíamos de estar ante toda situación y toda cosa que pase en nuestras vidas, para que podamos a su vez tener nuestros sentidos enfocados en Dios y cuando le veamos, no nos desconectemos, sino le permitamos estar en control de cada cosa y aún cuando no es el objetivo del día del Señor, nos pueda hablar Dios de como hacer y como actuar ante cualquier situación.

Si no lo hacemos de esta manera, no diferenciaríamos a Dios de ninguna droga, ya que solo estarían ahí ambos para desconectarnos y darnos un alivio temporal a nuestra condición, pero si hacemos como Él nos indica, experimentaremos esa paz que sobrepasa todo entendimiento al entender Él tiene control de todas nuestras situaciones.

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