Hay personas que tienen muchos problemas para orar, por tanto es más fácil para ellas el pedir en vez de orar, ya que no se imaginan a si mismas delante de Dios y no sabrían que decirle y por ende no se imaginan el hecho de que les responda, por tanto es mas fácil ir delante de Él y pedirle y tratar de medir sus respuestas por medio de como Dios cumple lo que piden.
Aunque lo que le escribo parezca hasta cierto punto absurdo, es mas real de lo que imagina, es verdad que las personas no sabrían que decirle a Dios estando a solas con Él, ya que en realidad no le conocen y estar a solas por un tiempo con un desconocido, es incómodo para cualquiera.
Ayer platicaba con alguien acerca de escuchar la voz de Dios, muchas personas dicen haberle escuchado y cuando me cuentan que es lo que les dijo, todas coinciden en que les dice “no temas, deja de preocuparte, todo lo tengo en mis manos”, le soy honesto, me cuesta un poco de trabajo el creer que Dios no tiene otra cosa que decirle a las personas mas que la misma frase y que no tiene otro tema que hablar con ellas que sus problemas, bueno, esa parte hace sentido, ya que las personas no hacen mas que hablar de sus problemas con Dios, que otro tema habría de ser común entre ellos?
Para serle honesto, yo no me dejo de sorprender de las muchas y tan asombrosas cosas que Dios tiene que hablar con nosotros, los secretos tan tremendos que tiene para revelarnos y como todo esta escrito en su palabra, pero todo es cuestión de que lo miremos con detenimiento para que nos sea revelado y que tenga un impacto profundo, no solo en nuestras vidas, sino en la vida de muchos otros y que pueda ser aplicados de manera cotidiana.
La Biblia nos habla de que Dios pretende hacernos sus amigos y habla de que es a sus amigos a quienes les revela sus secretos, es decir, si lográramos intimar con Él y hacernos dignos de su confianza recibiríamos el mismo trato que recibieron los hombres y mujeres la Biblia, que incluso el futuro les fue revelado.
Imagine usted que tan íntimos eran Dios y Abraham, que Dios le compartió sus intenciones acerca de los pueblos de Sodoma y Gomorra, y sabe por qué lo hizo?, sencillo, primero porque le tenía confianza, pero segundo y mas importante, conocía el corazón de Abraham y sabía como es que reaccionaría, y que intercedería por ellos, esa es la diferencia entre quien es Dios y como actúa y las ideologías que aman lo oculto y lo secreto, hace un par de días escuchaba un programa de radio acerca de las famosas cartas de la Virgen de Fátima, y como su contenido sigue oculto a raíz de lo terrible de su contenido, con el respeto que se merecen quienes crean en este tipo de asuntos, si lo vemos desde la perspectiva de Dios, Dios nunca reveló sus secretos a desconocidos, primero se encargo de intimar con aquellos a quienes les revelaría algo y luego habiéndolo capacitado y adiestrado adecuadamente, le mostró el futuro sabiendo que su reacción reflejaría el corazón de Dios.
Como se lo he venido diciendo en los pasados días, la gran mayoría de nuestras oraciones se basan en lo cotidiano y en lo efímero, es por ello que pocas veces vemos la mano de Dios clara y específicamente intervenir en nuestros asuntos, no nos queda mas que sospechar que así hizo, porque normalmente con la respuesta que recibimos a nuestras oraciones, no beneficiamos a nadie, muchas veces ni a nosotros mismos, ya que solo oramos por lo que nos hace sentir cómodos y nos evita el sufrimiento, mas no por lo que nos hace crecer y es permanente en nosotros.
La cita de hoy viene del libro de Isaías, el profeta al cual Dios le reveló los detalles de la venida de Jesús y note como le da instrucciones específicas de ensanchar su tienda, y sabe, no lo hizo con la intención de que viviera más cómodo y más a sus anchas, sino bajo el entendimiento que bajo una tienda mas ancha, caben mas personas, note como a su vez le habla de alargar las cuerdas y reforzar sus estacas, es decir, entre mas lejana la estaca y para esto necesita una cuerda mas larga, mas firme y mas estable estará la tienda.
Cuando nos referimos a quienes puedan habitar en nuestra tienda, son aquellas personas que son beneficiadas por nuestra intimidad con Dios y no son solo las personas por las que podemos orar, sino por las personas que son alimentadas de aquello que Dios nos habla a diario, pero estará de acuerdo que a las demás personas les importa poco que Dios nos diga “no te preocupes todo esta bien y yo tengo el control” todo el tiempo y repetidamente.
Orar en definitiva significa platicar con Dios, pero como toda plática, tiene que ser bilateral, tiene que tener 2 interlocutores, se refiere a un diálogo, al cual muchos no están acostumbrados, pero piénselo de esta manera, todas aquellas respuestas que no ha recibido, es porque pasa poco tiempo en silencio delante de Dios, y le aseguro que todo aquello que tiene que decirle tiene que ver con tantas cosas y tantas personas mas que solamente usted mismo, que probablemente por eso no las haya escuchado aun, porque normalmente solo va a hablar de sus propios asuntos con Él y cuando termina de hablar se retira.
Sabe, entre mas tiempo paso en mi relación con Dios, mas cuenta me doy de la veracidad de esta cita en específico, entre mas tiempo paso con Dios, mas personas son beneficiadas por mi intimidad con Él, mas personas cercanas a mi tienen la oportunidad de crecer y ser alimentadas de lo que Dios me habla y mi tienda se sigue ensanchando día a día, pero sabe, esto no es algo exclusivo mío, por el contrario, esto es algo que Dios planeó para todos nosotros, cada uno de nosotros tiene la responsabilidad de ir delante de Dios y de recibir sus propias instrucciones y a su vez ir ensanchando su propia tienda.
El día de hoy le quiero invitar a que reflexione sobre su oración y su intimidad con Dios, realmente puede decir que cada vez que va a la presencia de Dios regresa con instrucciones específicas de como ensanchar su tienda y cada vez que regresa de la presencia de Dios son mas las personas beneficiadas por su intimidad con Él, o es de las personas que solo se limitan a hablar de si mismas y sus problemas delante de Él, y ojo, esto no significa que ore por otros, significa que otros sean beneficiados por aquello que Dios le habla a usted.
Es mi oración que esta cita sea cumplida en su vida día a día y que no solo su vida de oración, sino su vida cotidiana sean transformadas por efecto de su intimidad con Dios.