Dejemos de sobrevivir y empecemos a gobernar

Hace un par de días platicaba con un gran amigo sobre las cosas que han sucedido en su vida y una y otra vez justificaba su vida actual en las cosas que le habían sucedido en el pasado o en su teoría personal de como había llegado al punto donde se encontraba, mi respuesta una y otra vez era la misma: La verdad de Dios no está sujeta a tu opinión, Dios es Dios con, sin y a pesar ti y no es alguien que cambie porque tu sufres o porque a ti no te vaya bien.

Mi intención con este amigo era el hacerle ver la diferencia entre lo que vive y lo que es Dios, ya que muchas veces solemos quejarnos de Dios y decimos que le entregamos las cosas y que vivimos bajo su voluntad, cuando en realidad no es así, ya que nunca le hemos reconocido como Dios, es decir, le entendemos como alguien superior, pero jamás le vemos como autoridad sobre lo natural y lo sobrenatural, lo visible y lo invisible y lo mas importante, sobre nosotros.

Aunque no lo crea, esto último es mas común de lo que cree, las personas dicen tener a Dios en su vida y lo mas probable es que sea parte de su vida, pero jamás llega a ser Dios sobre ellas, ya que no le reconocen como autoridad, por el contrario, solo le reconocen como el toma órdenes y el cumple caprichos, pero jamás como Dios.

Esto es parte de mi diario meditar, hay personas que dicen amar a Dios, pero jamás han leído la Biblia, y no podemos decir que amamos a un Dios que no conocemos, y esto es mas sencillo de entender de lo que cree, por ejemplo, hay quienes dicen amar a Dios y se confunden adorando todo tipo de ídolos que según ellos se parecen a Dios o son parte de la familia de Dios, pero que en realidad no lo son, además les rinden culto, les hacen mandas y sacrificios, cuando desde el primer hasta el último libro de la Biblia el Dios al que dicen amar les advierte de lo desagradable que es ante sus ojos esto, pero de alguna manera estas personas se consideran a sí mismas mas inteligentes que Dios y hacen las cosas “a su manera” y esperan que Dios respete esto.

Todo esto a su vez viene a colación, ya que muchas personas pasan hambre, necesidad, enfermedad y no se que tantas cosas y reniegan con Dios a causa de cada una de estas cosas, ya que son un factor constante de sus vidas y no saben como resolverlo, siendo que la Biblia comienza con una instrucción al respecto, ya que el propósito de Dios es el mismo desde Génesis hasta Apocalipsis.

Dios no nos envió a este mundo a ser bendecidos, ni tampoco nos envió a que nos fuera bien, pero tenemos que empezar por el principio, tenemos que entender que no somos parte de este mundo, sino que fuimos literalmente enviados a la tierra y que venimos de un lugar celestial donde el mismo Dios de la Biblia habita, y que venimos con un solo propósito a recuperar el dominio sobre la tierra y con ello a gobernar.

La cita de hoy me emociona, porque es una de las citas con mayor trascendencia en toda la Biblia, es una cita de gran poder, poder que Dios pone en nuestras manos y deposita en ellas autoridad en nosotros para que ejerzamos esa autoridad en su nombre.

Note como la cita comienza con una instrucción “fructificad y multiplicaos”, eso quiere decir una sola cosa, no es opcional, todas las personas debemos y tenemos la responsabilidad de tener hijos, ya que unos versículos antes, Dios mismo dijo “no es bueno que el hombre esté solo”, esto quiere decir que todas las personas que andan allá afuera preguntándose si es que Dios “tiene alguien para ellas”, la respuesta es “no”, Dios no tiene a nadie para ellas, es nuestra responsabilidad el encontrar a alguien y formar una familia, y luego es nuestra responsabilidad el darle hijos a Dios.

Es este segundo punto el cual también crea muchas dudas en las personas, muchas personas sufren por no poder tener hijos y piden a Dios que les de hijos, pero sabe, comienzan pidiendo de la manera incorrecta, ven el tener hijos como parte de el favor de Dios a sus vidas, cuando es al revés, es parte de nuestra responsabilidad el dar herederos a Dios, es parte de nuestra responsabilidad el dar a luz hombres y mujeres que le alaben y le adoren, el día que lo veamos con esos ojos, podremos dar instrucciones a nuestro cuerpo natural desde nuestro espíritu sobrenatural y este no podrá hacer mas que obedecernos y funcionar adecuadamente.

Se que esto que le digo puede sonar un poco duro para aquellos que se encuentran en el proceso de tener hijos y no pueden, pero sabe, en la gran mayoría de los casos, el enfrentar a las personas a la verdad, les hace libres como la palabra de Dios promete y hace cambios asombrosos en sus cuerpos, el cambiar un anhelo por una responsabilidad y transformar el deseo en una instrucción específica pone a funcionar ese poder que Dios ha puesto en nosotros de una manera asombrosa.

Y se que esto puede sonar difícil para quien nunca lo ha hecho, pero Dios previó esto, por eso la instrucción continua, me encanta como Dios dice “llenad la tierra y sojuzgadla y señoread sobre los peces, las aves y las bestias”, note como la instrucción tiene un alcance impresionante, ya que dice sojuzgad, es decir basados en la palabra y en lo que Dios habla a nuestros espíritus decidir que es correcto e incorrecto y hacerlo valer sobre la faz de la tierra y hacernos señores sobre toda criatura sobre la tierra.

Hace unas semanas me invitaron a un campamento en donde los moscos hacían de las suyas con los participantes y les hablaba acerca de que a mi hace años que no me pica un mosco, ya que un día decidí creer en la cita del día de hoy y di instrucciones desde mi ser sobrenatural a los moscos que viven en el mundo natural y desde ese día no ha vuelto a suceder que me piquen.

Aunque el ejemplo que le doy suene burdo, es 100% real, Dios nos hizo sobrenaturales con no solo la capacidad, sino la responsabilidad de gobernar sobre el mundo natural, de manera que cuando decidimos creerlo y seguir las instrucciones de Dios, empezamos a gobernar nuestros cuerpos, el entorno que nos rodea e incluso las situaciones externas a nosotros de manera que nuestro medio nos deja de afectar y empezamos a impactar ese entorno nosotros y es precisamente ese momento cuando empezamos a hacer la voluntad de Dios en nuestras vidas.

Como le decía Génesis empieza con la instrucción de gobernar y Apocalipsis termina con Jesús gobernando juntamente con nosotros la tierra mucho tiempo antes de poder partir a la morada que tiene preparada para nosotros, de manera que si usted quiere saber cuando es que Jesús vendrá de nuevo, eso es fácil de saber, el día que todos estemos conscientes de la cita de hoy y la llevemos a cabo, ese día la tierra estará preparada para que el Dios todo poderoso habite en ella nuevamente.

Por tanto, si usted alguna vez se preguntó a que vino a esta tierra y no encontró respuesta, la respuesta está en la cita de hoy y en lo que conlleva, deje de buscar su propósito y su misión en otros lados, el día que empiece usted a gobernar, estará empezando a cumplir con su propósito y estará comenzando a hacer la voluntad de Dios, deje de sobrevivir sobre la faz de la tierra y empiece a gobernar como le fue ordenado.