Hace unas semanas tuvimos en México lo que llamamos “puente” que no es otra cosa que un día de asueto que se junta con un fin de semana, haciendo un fin de semana largo, aproveché ese tiempo para tomar un verdadero descanso y no viajar, para trabajar en casa y sacar algunos pendientes que ya hacia algunas semanas traía atrasados.

Después de un par de días en casa y con la ciudad semi vacía debido al “puente”, me empezó a abrumar el silencio de mi casa, me asomaba a la calle y no había siquiera coches circulando, la mitad de los restaurantes que conocía estaban cerrados y muchos de los lugares que cuentan con el servicio de entrega a domicilio estaban cerrados.

Es un hecho que disfruto mucho mi tiempo a solas, pero este “puente” había llegado a lo extremo y lo ridículo y la mayoría de mis amigos cercanos se habían ido de puente y no se encontraban en la ciudad, y aunado a esto había decidido que no pasaría el puente sin que terminara mis pendientes, así que no le veía muy buena cara a mis siguientes 2 días.

Ya me había cansado de escuchar música y ya había hecho de todo por permanecer concentrado, hasta que tomé la decisión de mudarme con mi trabajo a la sala de mi casa y ver una película mientras trabajaba, para acompañarme y escuchar un poco de ruido.

Al ver la selección de opciones que tenía y estando en el ánimo de sacar pendientes, decidí ver una película que tenía ya meses conmigo y que no me había dado el tiempo de ver, así que puse la película y seguí trabajando.

Como se imaginará usted, ni vi la película, ni trabajé, ya que una cosa me distraía de la otra y fue una de las peores decisiones que he tomado en mi vida , ya que desaproveché un tiempo valioso y solo agregué frustración a mi estado de ánimo que de por si ya era malo.

Solo recuerdo que hasta de ropa me cambie en ese tiempo, ya que no había cosa que me complaciera, le ha sucedido?

Todo esto se lo comento, porque así como yo tenía pendientes de trabajo, muchas personas los tienen espirituales, y pretenden esperar a “tener tiempo” para ponerse a orar por ellos o ponerse a cuentas con Dios, pero luego, al igual que me sucedió a mi que en vez de solo trabajar, su mente está en donde los demás están, la mitad del tiempo no pude evitar pensar en mis amigos que estaban en la playa o simplemente con sus familias mientras yo estaba solo, en casa y trabajando y todo esto por no hacer las cosas a tiempo y en el orden requerido.

Exactamente igual nos pasa en nuestra vida espiritual y empezamos a sumarle cosas a lo que pensamos y a lo que sentimos y llega un momento en que nos es tan difícil concentrarnos para orar debido al ruido que hay en nuestra cabeza, le suena familiar?

Pero esto no solo nos pasa con la oración, hay veces que no disfrutamos siquiera de nuestra bendición, porque nuestro estado de ánimo es tan malo que mezclamos lo que nos pasa con lo que sentimos, con lo que pensamos e incluso la bendición que viene de Dios la confundimos y no la disfrutamos.

Esto se lo digo, porque no me dejo de asombrar ante las miles y miles de personas que dicen recibir algo de Dios, pero que viene con una condicionante, o bien pareciera venir incompleta o que lejos de ser una bendición pareciera un castigo y lo suelen justificar con un “Dios sabe porque hace las cosas” y lo más común es que la culpa nuble su entendimiento y no sean capaces de identificar a Dios en lo que les sucede en ese preciso momento.

Le voy a contar un secreto si me promete no contárselo a nadie, el trabajo que tenía pendiente ese fin de semana, lo hubiera podido terminar en tan solo unas 3 o 4 horas, si hubiera dedicado un tiempo exclusivamente a hacerlo y hubiera planeado bien mi puente, pero como no lo hice, desperdicié mas de 3 días en pasarla mal y a duras penas terminar aquello que necesitaba hacer.

Justo de esa manera nos sucede en lo espiritual y en nuestra relación con Dios, no solemos planear nuestro tiempo de intimidad, no contemplamos siquiera pasar tiempo en silencio con Dios y mucho menos tenemos el hábito de escuchar su voz, porque preferimos lo místico y que nos hable por medio de señales, y cuando menos nos damos cuenta la bendición llega y llega acompañada de un montón de otras cosas y a veces lejos de provocarnos alegría pareciera que nos causa tristeza.

La cita de hoy es una que me hace detenerme de tiempo en tiempo, ya que es una verdad que no podemos dejar de entender, cuando Dios hace algo en nuestra vida lo hace para bien y lo hace con toda la intención de causarnos gozo, su palabra dice “hay plenitud gozo en la presencia de Dios”, por tanto donde esta el favor de Dios, tuvo que haber estado Dios previamente, no lo cree?

En muchas ocasiones por tener la cabeza y el corazón llenos de ruido y de otras cosas, no identificamos la bendición de Dios, solemos mezclar lo que pensamos, lo que sentimos y lo que nos sucede y luego solemos pensar que todo viene junto y que Dios nos bendijo a medias, pero es justo como me pasó en mi “puente”, en vez de separar un tiempo para cada cosa y disfrutar cada uno de ellos, pase un tiempo largo y frustrante, así nos pasa con lo que Dios hace en nuestra vida.

Es sabio apartar un tiempo para cada cosa, es sabio tomar un tiempo para disfrutar la bendición de Dios y es sabio reconocer cada cosa por lo que es, es decir a veces hay que pagar un precio por ciertos beneficios, pero a veces no es que paguemos demás, sino que desperdiciamos lo que tenemos por no hacer las cosas de manera adecuada y solemos culpar a Dios pensando que “por algo hace las cosas”, es sabio darle crédito a Dios por la bendición y no mezclarla con las cosas carnales, mentales y almáticas de nuestra vida.

 

Lectura del día de hoy: Proverbios 10

¡Comparte esta entrada, elige tu plataforma!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Un comentario

  1. Rumary

    Gracias senor Jesus Cristo, por estas palabras, verrdaderamente son una gran bendicion para mi vida, gracias padre, por la sabiduria, esa profundidad de tu conocimiento, expuesto en estas letras que yo puedo entender claramente. Continua padre agregando salud y bendicion a la vida de este autor para que perpetue este conocimiento. Amen.