Todos en alguna ocasión hemos anhelado un milagro, algunos por curiosidad, algunos por necesidad y otros incluso por desesperación, ya que se encuentran en el punto donde se dan cuenta que sus fuerzas y sus medios no son los suficientes para hacer aquello que necesitamos o anhelamos.

El problema radica muchas veces en que nuestro último recurso es Dios, es decir, reconocemos que no podemos hasta el final y recurrimos a Él con urgencia y emergencia, y luego no sabemos porque es que no recibimos respuestas suyas.

Me llama mucho la atención la rivalidad entre licenciados e ingenieros, creo que en cientos de ocasiones he sido corregido cuando le digo a alguien “licenciado” y recibo por respuesta un “ingeniero por favor, aunque le cueste mas trabajo”, me causa cierta gracia, pero entiendo que su profesión es parte de su identidad y sus años de estudio les costó y quieren ser reconocidos de acuerdo a ello, y sabe hacemos con Dios exactamente lo mismo, pretendemos hablar con el Rey de Reyes, quien a si vez en el Creador del Universo y le tratamos como si fuera el mandadero quien tiene que estar atento a nuestra agenda, a nuestra disponibilidad y a nuestros antojos.

Desafortunadamente las personas conocen demasiado poco acerca de Dios, no saben quien es y no saben para que es que nos mandó a la tierra, por tanto no saben como dirigirse a Él y por tanto no reciben de Él como Él lo tiene planeado para nosotros.

Hace un par de meses escribí acerca de esto, las personas han dado un nuevo significado a la palabra milagro, ahora en vez de significar algo sobrenatural y que viene de la mano de Dios, significa algo que sucede esporádicamente y es poco común.

Si lo nota, todo esto son confusiones y son cosas que tienen un sentido, pero en realidad le damos otro, y no entendemos como es que no entramos en comunión con Dios y como es que no recibimos de su mano como la Biblia nos promete.

Ayer platicaba con un buen amigo acerca de esto, le explicaba acerca de Moisés, quien fue criado en la casa del Faraón y fue criado como príncipe, de manera que si por alguna razón el hijo del Faraón hubiera faltado, muy probablemente (esto es mi conclusión personal, no hay datos específicos en la Biblia al respecto) Moisés hubiera podido ocupar el trono de Egipto, en otras palabras Moisés fue criado y preparado para gobernar.

Me imagino que conoce la historia y sabe que Moisés tuvo que salir de Egipto y fue llevado por Dios al desierto, y ahí aprendió a pastorear las ovejas de Jetro quien luego fue su suegro y cuarenta años después fue llamado por Dios para liberar al pueblo de Israel de la esclavitud egipcia.

Muchos se preguntan que sentido tiene el haber sido grande en la casa de Egipto, para luego ser pastor de ovejas en el desierto?, que onda con Dios?, pero permítame explicarle:

Primeramente Dios permitió que Moisés fuera educado para gobernar y le fueron desarrollados sus talentos y sus habilidades para ello, luego, fue llevado al desierto en donde aprendió a vivir bajo autoridad y a entender que no hay trabajo pequeño siempre y cuando sea para Dios y posteriormente con esa consciencia, Dios le llevó no solo a liberar a los Israelitas sino a gobernar y juzgar sobre ellos.

En otras palabras, Dios desarrolló en su juventud los talentos que iba a usar mas adelante en Moisés, y luego puso a Moisés en una situación donde había de rendirlos a Dios y a reconocer su dependencia de Él, y cuando esto sucedió, lo bendijo de una manera asombrosa.

Sabe, Dios no bendice nomás así porque si, a Dios le agrada hacer pactos, y esos pactos tienen una validez eterna, nada puede deshacerlos, el problema esta en que los pactos no solo son de Dios para con nosotros, sino son en 2 sentidos, son continuos, es decir, no dejan de ser y requieren la misma constancia de parte de nosotros.

Los milagros son algo cotidiano para alguien que está en pacto con Dios y no son esporádicos como muchas personas creen, pero hay que entender lo siguiente:

Dios nos ha dado a usted y a mi una serie de talentos y habilidades, y nos da la oportunidad de desarrollarlos, y cuando lo hemos hecho, nos orilla a que los rindamos a Él, de manera que Él los pueda usar para sus planes, mas allá de que nosotros los usemos a nuestros beneficios, si estamos dispuestos a ello, Él hará un pacto con nosotros, en donde las bendiciones y el poder de lo alto fluirán en nuestra vida de constante, pero en la que hemos de estar atentos y conscientes a nuestra santidad, para que Dios pueda hacer gala de su gloria por medio nuestro de manera constante y cuando a Él se le antoje.

Por tanto mi invitación de esta mañana es la siguiente: tome un tiempo y piense en todo aquello para lo que es usted bueno, recapitúlelo, y póngalo al servicio de Dios reconozca que no tiene sentido ser bueno en algo si no es usado por Dios y busque a Dios en su intimidad y busque a Dios en su palabra de manera que Dios le muestre a usted el pacto que quiere hacer con usted y de esa manera entre en pacto con Él y viva una vida gloriosa y llena del poder de Dios como lo dice la cita de hoy, que le parece?

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