Una de las cosas que procuro no hacer (perdón si a alguien se lo hecho, le aseguro que no fue con intención) es responder a las personas con bibliazos, es decir, procuro no responder simplemente con una cita bíblica que no se explique por si sola y pretender que las personas lo entiendan de la misma manera que yo lo hago, pero le aseguro que la respuesta a muchas de las preguntas que me hacen es la misma:

Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites (Santiago 4:3)

En otras palabras, casi todas las oraciones que no son contestadas, tienen su fundamento en el que no sabemos pedir, y porque por lo general pedimos para nosotros y no tomamos en cuenta a Dios mas que como el cumplidor de nuestra oración y no como partícipe dentro de ella.

Como lo mencionaba en el devocional de ayer, considero estadísticamente hablando que las oraciones más comunes y aún mas frecuentes que las oraciones por motivos de salud son la oraciones por dinero y juntamente con estas las oraciones por trabajo, ya que por lo general el trabajo es la solución a muchos de los problemas de dinero de las personas.

Creo que no sería capaz de enumerar las solicitudes que he recibido pidiendo apoyo en oración por conseguir un trabajo o conseguir un trabajo mejor, y por alguna razón en muchas ocasiones a pesar de no sentir paz al hacerlo, lo hago por compromiso a quien me lo pidió, pero quiero que entienda esto:

Dios es un Dios que tiene pensamientos de bien para nosotros, es decir, es su anhelo que seamos bendecidos, lamentablemente en muchas ocasiones, estamos mas enamorados de la bendición que del autor de la misma y solo le invocamos para saciar nuestra necesidad y luego nos olvidamos de Él, no puedo generalizar, pero si lo piensa bien, es algo que a usted y a mi nos ha sucedido con frecuencia.

El trabajo es algo interesante, muchos lo ven como una gran necesidad y ruegan incansablemente por el, como si Dios se los tuviera que dar, siendo que si lo entendemos desde la perspectiva de Dios aprenderíamos mucho sobre el trabajo.

Primeramente en Génesis, Dios dijo que por la desobediencia el hombre habría de ganar su diario pan por medio del sudor de su frente, es decir, por medio del trabajo, mas adelante, Dios dijo “el que no trabaje, que no coma”, y por último (solo por poner unos cuantos ejemplos), esta la cita de hoy, que habla de que el trabajar es parte de nuestro deber, no solo para que saciemos nuestras necesidades, sino que seamos capaces de compartir con aquellos que tienen menos que nosotros.

En otras palabras y para ser mas claros, no es que Dios deba de darnos un trabajo, ni ayudarnos a conseguirlo para que con ello arreglemos nuestros problemas financieros y salir de deudas, sino que es nuestra responsabilidad el trabajar para cumplir con lo que Dios espera de nosotros, por tanto le propongo plantearlo de otra manera:

Si trabajamos, cumplimos con aquello que Dios demanda de nosotros, y con ello le damos honra, el trabajar nos dará provisión para vivir, para retribuir a Dios de acuerdo a sus instrucciones (diezmar, ofrendar, dar primicias) e incluso para ahorrar, pero el propósito de trabajar no debemos de ser nosotros, ni nuestras necesidades, sino en cumplir con el plan que Dios tiene para nosotros y ser un reflejo de su gloria.

Por tanto quiero invitarle a que se detenga por un momento, si usted esta pidiendo algo que no sucede o que no llega, probablemente pase como dice en Santiago 4:3, probablemente esta pidiendo mal, es como aquellos que piden que Dios les de hijos, cuando la Biblia nos dice que somos nosotros quienes damos herederos a Dios, por mientras pidamos para nosotros y nos olvidemos de su propósito, será cada vez mas difícil que recibamos.

En esta serie acerca del dinero, el trabajo juega un papel primordial, ya que de el trabajo que tengamos es del que obtendremos ese dinero que anhelamos y si en ese trabajo nos olvidamos de Dios, probablemente nos será difícil obtener el trabajo o conservarlo.

Si usted está orando desesperadamente por un trabajo, deténgase, y cambie su oración, entienda que por medio del trabajo que usted obtenga, primeramente esta obedeciendo a Dios en trabajar, piense que por medio de obtener no solo un trabajo si no un gran empleo, honra usted a Dios al reflejar su grandeza y deje que las finanzas provenientes de ese trabajo sean la añadidura que viene de Dios al poner sus ojos primeramente en Él y en después en sus necesidades.

La cita de hoy nos habla que dejemos de robar o hurtar y a lo mejor ni usted ni yo robamos físicamente a nadie, pero que me dice del tiempo que robamos al orar por cosas que no serán respondidas en vez de reclamar las bendiciones que están en puerta para nuestras vidas una vez que hayamos dado honra y gloria a Dios.

Nuestro trabajo es parte de nuestra manera de honrar a Dios, no ore pidiendo a Dios un trabajo que solucione sus problemas, sino reclame a Dios la oportunidad de honrarle por medio de tener un trabajo que refleje su gloria y su poder y le haga verse como un verdadero hijo del Rey de Reyes y Señor de Señores, que le parece?.

 

Efesios 4:28 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad.

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2 Comentarios

  1. En vez de pedir por trabajo , reclamar a Dios trabajo para darle honra y gloria?