Hace un par de días al estar en casa, no me percaté de que la temperatura bajaba y cuando menos lo pensé tenía mucho frío y solo vestía una camiseta, de inmediato fui a mi cuarto y me puse un sweater, pero me pasó como se dice en México, me entró el frío y sabía que estaba a punto de enfermarme.

Esa noche fue una locura, la fiebre me acosó toda la noche e incluso tuve alucinaciones, fue una noche de horror, al día siguiente, me sentí mejor y decidí no cancelar mi viaje de fin de semana a ver a unos muy queridos amigos.

Mi primer noche en casa de mis amigos no fue mejor que la anterior, la fiebre hizo de las suyas y la pase tan mal como se podía, lo mas frustrante era el soñar cosas ridículas causadas por la fiebre, que no me dejaban descansar.

En mi primer mañana en casa de mis amigos, platique a mi amiga mi situación, y me dio una serie de recomendaciones, empecé a tomar anti gripales, y otros medicamentos de acuerdo a las recomendaciones de todos, me frote con aceites herbales e incluso fui ha hacerme unos análisis clínicos, todo ayudó un poco, pero nada podía contra la fiebre la cual me seguía acosando de noche y hacía de las suyas, el lunes llegó y tenía una cita temprano con un cliente, y en el pésimo estado físico que me encontraba, me fui a verlo, me costó mucho trabajo el mantenerme despierto y atento, pero lo logré, espero mi cliente no lo haya notado, posterior a eso, aún me quedaba manejar un par de horas a casa, al llegar a casa, como ustedes se imaginan, llegué molido y directo a la cama, hasta que a mitad de la noche de nuevo la fiebre no me dejó dormir ni descansar.

Durante este período, todas las personas que se enteraban de mi estado, me hacían miles de recomendaciones, me decían que tomara esto o aquello, le soy honesto, estaba empezando a hartarme de los remedios caseros o de los medicamentos que no necesitan prescripción, todo lo que me recomendaban ayudaba, pero nada solucionaba mi situación!

De manera que en mi primer día de regreso a casa llamé a una gran amiga y doctora, fui a visitarla y de la manera mas sencilla me recetó una pequeñísima pastilla blanca que debo de tomar por 3 días y con eso mi problema estaría resuelto.

Cuando fui a comprar la pastilla, y la vi, no le miento, dudé, no estaba seguro que esa pequeña pastilla tuviera un efecto mayor que los montones de pastillas y remedios que había estado tomando en días anteriores, pero aún así me dejé sorprender.

La pastilla la tomé justo antes de ir a dormir y cual fue mi sorpresa, mi primer noche descansando como un rey!, esa pequeña pastilla era algo así como milagrosa!, era justo lo que yo necesitaba y nada mas!, estaba tan contento que incluso pensé en dejar el resto de los medicamentos (los cuales mi doctora me dijo siguiera tomando), ya que pareciera no necesitar mas!.

Ahora que me siento bien, a su vez me siento como un necio, ya que no es la primera vez que me enfermo de un resfriado y no es la primera vez que me da fiebre por las noches, y aún así he preferido las recomendaciones de otros que ir al médico y ponerle solución al asunto de tajo, la verdad incluso me avergüenzo de solo decirlo.

En nuestra vida espiritual, no nos sucede distinto, las personas pasan por todo tipo de situaciones adversas y pasan sus vidas pidiendo consejo a cuantas personas conocen, y hacen todo tipo de cosas buscando solución y alivio a sus situaciones, lo mas triste del asunto, es que como a mi me pasó, estos remedios ayudan un poco, pero en realidad no resuelven el problema y jamás su situación se arregla o compone, sino hasta que van al médico de médicos.

La Biblia nos dice que Jesús murió por todos nuestros pecados pasados, y aún los que no hemos cometido, por nuestras enfermedades e incluso nuestros problemas, el problema es que no sabemos como acceder a Jesús, todos buscamos en algún momento su favor y su ayuda, pero no entendemos que para accesar a sus beneficios, nos es necesario nacer de nuevo, y muchos se preguntan “que es eso de nacer de nuevo?”, es tan sencillo como hacer una confesión de fe, algo tan simple como reconocer a Dios como nuestro padre y salvador, como nuestro Señor.

Se que para muchos esto puede parecer insignificante, pero le aseguro que no lo es, así como la pequeñísima pastilla blanca que me recetó mi amiga la doctora y era justo lo que necesitaba, así sucede con el nacer de nuevo, pareciera una simple y sencilla declaración verbal, pero con un gran impacto en la vida de las personas, en donde por primera vez podrán experimentar el Reino de los Cielos.

Si usted no está seguro de que Dios le escucha o bien, no sabe como recibir los beneficios de Dios, tómese el tiempo y decida nacer de nuevo decida darse la oportunidad de hacer un esfuerzo mínimo y recibir el beneficio máximo de la cruz, que le abrirá las puertas a una nueva dimensión de intimidad y el favor de Dios.

Si le interesa nacer de nuevo, solo tiene que hacer click aquí

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