Para tener una relación con Dios se necesita fe, bueno, al menos eso es lo que las personas creen, pero después de creer que se necesita fe, está el entender que concepto tiene cada persona acerca de lo que es tener fe, es decir, algo sumamente sencillo se convierte en algo sumamente complicado, todo a raíz de una simple y sencilla causa, y esa causa es el pensar que nuestra relación con Dios se trata de nosotros y de lo que Dios va o puede hacer por nosotros.

En cientos de ocasiones he escuchado a cientos de personas decir “tengo mucha fe en Dios, se que hará tal cosa por mi”, y he tenido que hacer un alto y meditar acerca de ello, ya que hay que entender varios puntos antes de poder decir esto:

Primero, tener fe, no se trata de que Dios vaya o no a hacer algo, tener fe se trata de creer en un Dios que no vemos, pero que aún así es soberano sobre todas las cosas.

Segundo, no es que Dios vaya a hacer “x” o “y” cosa por nosotros, sino por el contrario, Él ya lo hizo todo por nosotros, es decir, al morir en la cruz, ya nuestros pecados, nuestros problemas e incluso nuestras enfermedades quedaron solucionados, de manera que ya no nos queda pedir algo imposible, sino nos toca tomar de lo que ya esta hecho.

Tercero, Dios nos dice en su misma palabra que sin fe, es imposible que le agrademos (Heb. 11:6), es decir, cualquiera que tenga fe con sufrimiento, no esta creyendo de verdad y duda del poder y de la soberanía de Dios.

En realidad la raíz del problema es una sola, tenemos un Dios al que en realidad no conocemos y es precisamente porque no lo conocemos, que nos cuesta trabajo creer en Él, y por tanto no tenemos una fe verdadera y auténtica, ya que no sabemos de lo que estamos hablando.

Hace un tiempo veía un programa acerca de como los pueblos expresan su fe, y es curioso, ya que en general, todos estos pueblos expresa su fe por medio de hacer algo, ya sea peregrinar, sacrificar, sacrificarse, y que se yo que otras cosas, lo interesante es que cada una de estas cosas que hacen, van en aumento al no recibir la respuesta de aquello que piden, de hecho el moderador del programa que veía, narraba que las civilizaciones antiguas llegaron a los sacrificios humanos ante la desesperación de no recibir respuestas, pero en realidad, ninguna deidad se los pidió, todo radicaba en su imaginación y en su falta de fe, ya que desconocían quien era el dios al que adoraban y nunca buscaron en su interior, si había un verdadero Dios que pudiera hacer algo por ellos en verdad.

Me encanta entender del Dios de la Biblia, que Él es distinto a cualquier otro dios, ya que Él no espera sacrificios para sentirse adorado, ni necesita de procesiones, ni de ninguna muestra de agradecimiento, en otras palabras, el Dios de la Biblia no tiene problemas de autoestima, Él sabe perfectamente quien es, y que lo que vemos e incluso lo que no vemos es autoría suya, por tanto el solo contemplar su creación ya le es alabanza, no en vano menciona repetidamente en su palabra que la naturaleza no le deja de alabar con el puro hecho de cumplir con la función que cada ser fue creado, eso es alabanza.

En la mayoría de nuestros acercamientos con Dios, tenemos un falso entendimiento de quien es Dios y de lo que se trata nuestra relación con Él, y hacemos una de dos, o llegamos como merolicos delante de Él, hablando multitud de cosas que ni siquiera entendemos, o bien nos derramamos en suplicas que nos cuesta trabajo creer que serán respondidas por Él, pero vea lo que el salmista entendía de Dios y vea como su canción (los Salmos son canciones) expresa lo que Dios pide de su relación con nosotros.

Note como Dios solo dice “estad quietos” es decir, tómense un tiempo para Dios, y posteriormente dice “conoced que yo soy Dios”, es decir, observen lo que Dios ha hecho y entiendan el propósito de ello.

Para explicarle mejor esto, le voy a poner un ejemplo, le ha pasado que va de vacaciones y llega a una playa o bien a un campo donde no hay gente y donde no hay muchas cosas alrededor, y de alguna manera, no nos salen palabras de la boca?, simplemente sus ojos se llenan de todo lo que ven, que no hay ni necesidad ni oportunidad de expresar palabras, solo quedamos impactados y maravillados por lo que vemos.

Esa sensación no es otra cosa mas que un encuentro con Dios, por medio de su creación, cuando tenemos oportunidad de encontrarnos con ella, nuestro ser interior, no hace mas que aquello para lo que fue creada, callar y reconocer a Dios, pero sabe, no es necesario que vayamos al campo o a la playa para poder hacer esto, solo tenemos que hacer un alto en nuestro camino, nuestra vida y lo que Dios ha puesto y hecho en ella es igual de maravilloso y lucidor que el paisaje mas exquisito, solo tenemos que detenernos a verlo.

Le puedo decir que la cita de hoy me dejó mas enamorado de Dios que cualquier otra, solo tengo que detenerme y reconocer que nada de lo que hay en mi vida sería posible sin la intervención de su mano, ni mi trabajo, ni mi ministerio, ni siquiera las amistades que tengo, al hacer un alto y estarme quieto, me doy cuenta que tengo una gran vida, como un hermoso paisaje y al observarlo no puedo hacer mas que reconocer que tiene un solo autor, ese es Dios y al hacer esto, estoy en el primer y a su vez mas firme paso de mi fe, al encontrarme con el creador de lo que soy de lo que pasa en mi vida, y después de eso me será revelado quien es Él para poder tener una relación cara a cara, llena de su gloria y como Él la planeó desde antes de la creación del mundo, así que, como ve?, se atreve a callarse, para conocerle y recibir sus verdaderos beneficios?

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2 Comentarios

  1. IMPACTANTE…BENDICIONES RENÉ