Un amigo es un punto de partida.

Hay muchas razones por las cuales amo tener amigos y muchas por las que incluso me considero adicto a ellos, sabe, es emocionante saber lo que pasa en la vida de una persona por mientras no la vemos y mas emocionante es, si aquello que pasó en su vida, fue provocado por Dios (ya que lamentablemente no siempre lo es) y este amigo tiene la apertura de compartir con nosotros su caminar, para alimentar el nuestro y permítame explicárselo.

Elías fue el mentor de Eliseo, o bien, Eliseo fue el discípulo de Elías, el ser mentor o discípulo tenía una gran implicación, ya que el discípulo comenzaría por servir al mentor, al grado que le conociera íntimamente (me refiero a sus hábitos y costumbres personales), de manera que llegaban a tener mucha confianza el uno con el otro, siempre cuidando las distancias y los modos, de manera que nunca se confundieran los roles y nunca se perdiera el orden de quien aprendía de quien, pero inevitablemente terminaban siendo amigos de lo mucho que se conocían y en el caso de hombres de Dios como Elías y Eliseo, de ver que no era uno o el otro los importantes, sino la intervención de la mano de Dios en su vida.

Lamentablemente ya no vivimos en los tiempos que ellos vivían, pero si podemos aún llegar a ser discipulados por alguien o bien convertirnos en su mentor, siempre y cuando no perdamos de vista que nuestro mentor podrá observar, cuestionar e incluso corregir cualquiera de los aspectos de nuestra vida, o bien que nuestro discípulo pueda ver a través de nuestra carne y conocernos como nadie mas, pero creo que los tiempos actuales lo hacen cada vez mas difícil.

Pero sabe, la amistad es algo que no ha dejado de ser, en definitiva es algo que se ha vuelto en algo mas complejo y mas con la llegada de los medios sociales, donde podríamos solo mostrar una parte controlada de nosotros o bien pintar una realidad que en realidad no nos corresponde, pero no hay como una sincera y directa mirada a los ojos  que nos permita brincar esa barrera y una palabra firme, directa pero amorosa que nos ayude a doblegar las barreras de cualquiera y posamos empezar una verdadera amistad, y sabe, un “quiero ser tu amigo” también funciona, aunque es cada vez menos común.

Cada vez que pienso en mis amigos me emociono, cada uno de ellos está en una etapa diferente de su vida, cada uno ha crecido de manera distinta, hay tanto que estar al pendiente de sus vidas que no me dejo de sorprender, pero sabe, cada amigo es un mundo y algo nuevo que aprender y de lo cual alimentarse.

Hay amigos que pasan por situaciones que yo pase hace días, meses o años, y es asombroso el observarlos, porque ahora puedo reconocer a detalle cada situación por la que yo pasé a lo mejor de manera inconsciente y no controlada y puedo ver lo que Dios hace en su vida, este aprender o bien hay amigos que van en etapas a las que yo aún no llego, pero me alimento de tratar de entender lo que Dios hace en su cotidiano vivir y los milagrosos hechos que realiza en la vida de cada uno de mis amigos, por lo que lo entiendo de esta manera.

Mi caminar empieza, donde el de mis amigos termina…

Es decir, al ver la vida de mi amigo, puedo hacer 2 cosas, simplemente ignorarla y disfrutar de nuestra amistad, o bien construir sobre cada cosa que aprenda de ellos y madurar mas rápido, esto me encanta, porque las personas a veces creen que el dicho de “nadie experimenta en cabeza ajena” es cierto y creen en el mas que en Dios, siendo que Dios llenó la Biblia de cosas y casos como el de Elías y Eliseo, para demostrarnos que el orden celestial es diferente y mucho mas poderoso que el del mundo.

Eliseo comenzó su caminar cuando Elías murió, pero note, como no se conformó con tener lo que Elías tenía, sino el doble como menos, y la razón del porqué es muy sencilla, Eliseo no solo era discípulo de Elías, sino su amigo y se alimentaba de lo que sucedía en la vida de Elías (uno de los profetas mas poderosos de la Biblia), de manera que cada cosa que pasó en la vida de Elías, no tenía porque ser repetida en la de Eliseo, el ya había estado ahí, el ya había hecho las mismas preguntas que Elías y había aprendido de las respuestas que Dios dio a Elías, así que por ello no tuvo reparo de pedir el doble de lo que Elías tuvo, ya que donde Elías terminó, ahí comenzó Eliseo su caminar.

Y con ello regreso a que soy adicto a la vida de mis amigos, cada vez que los veo, mi punto de partida para ese día, esa semana, ese mes o ese año se adelanta, trato de escuchar con mucha atención lo que me cuenten y me adueño de ello, así permito a Dios que trabaje cada uno de los aspectos de mi vida y que todo se de por medio del crecimiento de mis amigos.

Pero sabe, mi vida esta armada al igual que la de ellos, me emociona contar a cada uno lo que Dios está haciendo, de manera de asegurar que mi vida este presentada como un rico buffet que les apetezca y por medio del cual se puedan alimentar y comiencen su caminar justo donde yo termino.

En otras palabras y regresando al principio de éste devocional, un amigo es un punto de partida.

Mi invitación de hoy es sencilla, pero tiene un gran trasfondo, solo ore y pida a Dios que le muestre que es lo que El hace en la vida de sus amigos, y pídale sabiduría para asimilarlo y apropiarse de cada situación de manera que pueda demostrar al mundo que la filosofía de los hombres esta por debajo de la de Dios y haga como los personajes de la cita de hoy, sea el Elías de muchos y trate de tener tantos Eliseos como le sea posible.

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