Tener una buena relación con Dios es esencial para cualquier ser humano y creo que todos la queremos tener, pero desafortunadamente no todos saben como u otros simplemente se dejan guiar por lo que ven de otros o bien por lo que escuchan de otros, mas no siempre tienen la certeza de que sea exactamente como Dios lo planeó para ellas.

Muchas personas van por la vida pensando que Dios es amor, lo cual no es ninguna mentira, pero no es como lo imaginan, ya que muchos suelen creer, que porque Dios los ama, simplemente pasará por alto todo acto de su vida y les concederá todo lo que pidan, y afortunadamente eso no es amor, eso es como decimos en México “alcahuetería”, en otras palabras, no es otra cosa que solapar las actitudes irresponsables de los demás con el titulo de “por amor”, mas Dios no es así.

Es cierto que Dios es amor, y lo demostró al grado de morir por nosotros, y también es cierto que Dios todo lo perdona, y es muy simple de entender y recibir si lo hacemos con el corazón adecuado, solo que debemos de entenderlo, para poder recibirlo.

Para poder recibir el perdón absoluto de Dios tenemos que ir delante de El con un corazón humillado, y esto se traduce de la siguiente manera, necesitamos tener una consciencia de nuestro pecado, necesitamos tener la consciencia de que ese pecado nos puede provocar la muerte eterna, tenemos que tener la consciencia de que ese pecado no solo queda en nuestra vida, sino que pasará a las siguientes generaciones y estas aún sin tener culpa, nacerán con maldición y no sabrán ni de donde viene, tome en cuenta que aún la mas sencilla e inocente mentira es pecado, recuerde que para Dios es igual un asesino que un mentiroso, ya que en el pecado no hay rangos, ni hay intensidad, es decir no hay pecados peores los unos que los otros, todos nos llevan a la muerte eterna, por tanto cualquier pecado por pequeño que sea, nos puede hacer pasar una eternidad lejos de Dios y de su favor.

Entendiendo esto, podemos entender, el porqué muchas cosas no suceden en nuestras vidas y porqué nuestra consciencia no está del todo tranquila y no nos sentimos capaces en muchas ocasiones de escuchar la voz de Dios,

Afortunadamente Dios sabe esto, y por ello dio un remedio con un impacto mayor que nuestro pecado, pero como le decía previamente, no lo podremos recibir a menos que estemos completamente conscientes tanto del impacto del pecado, como el del perdón que Dios nos da.

Para poder recibir ese perdón del cual le hablo, nos es necesario ir delante de la presencia de Dios y y pedir perdón de una manera especial, sabiendo que si logramos tocar el corazón de Dios, éste nos arrebatará de las garras de la muerte misma, y sabiendo que una vez que nos haya perdonado, lo hizo para siempre, no tenemos que cargar con ese pecado en nuestra consciencia y no tenemos porqué estarlo recordando.

Muchas veces, no recibimos perdón porque no pedimos perdón adecuadamente, ya que al pedir perdón una parte de nosotros está consciente de que pronto volveremos a caer y que pronto tendremos que pedir perdón de nuevo, ya que entendemos el pecado como parte de nuestra vida y a nuestros propios ojos creemos que difícilmente podremos quitarnos ese hábito o esa manera repetitiva de pecar, le ha sucedido?.

Es por eso que es necesario ir delante de la presencia de Dios con la consciencia de que estamos en peligro de muerte para que podamos realmente pedir perdón adecuadamente, para que podamos verdaderamente clamar y ser rescatados noche a noche.

Cuando le digo que seamos rescatados noche a noche, se lo digo con un fin muy especial, ya que la Biblia confiesa que no somos capaces de dejar de pecar, pero imagine esto, si realmente somos rescatados de la muerte noche a noche, no tendremos que pasar por el mismo pecado mas de una vez, cada vez nuestra manera de pecar será distinta y llegaremos al punto donde nuestra vida sea transformada, no porque ahora seamos buenos, sino porque el amor y el perdón de Dios nos han transformado y han borrado actitudes y hábitos de nuestra vida que nosotros no podíamos ni sabíamos, cada noche seremos limpiados y hechos dignos delante de Dios para que así podamos descansar en su presencia.

La cita de hoy me emociona, ya que nos enseña a entender como es el amor de Dios, ya que si somos perdonados de manera constante, seremos objeto del amor de Dios constantemente, de manera que habiendo recibido amor, podemos ser instrumentos de amor, ya que no podemos dar algo que no tenemos, pero si podemos dar cada día algo que recibimos la noche previa y que nos permitió tener un sueño glorioso, no lo cree?.

Por tanto mi invitación de esta mañana es sencilla, haga un breve y sencillo análisis de su vida e identifique aquellas cosas que son pecado, tome un tiempo y dése cuenta como ese pecado le llevará inevitablemente a la muerte eterna si es que no lo presenta delante de Dios, tome un tiempo y reflexiónelo, llévelo delante de Dios y confiese que es usted incapaz de dejar de hacerlo porque no sabe como, pero dígale que en realidad reconoce ese acto como pecado y lo quiere erradicar de su vida.

Permita que Dios tome ese pecado y lo invalide, permita que Dios quite ese pecado de su consciencia y permita que reemplace el lugar que ese pecado con amor, sea objeto del amor, tanto como usted vaya delante de Dios, tanto amor recibirá y de esa misma manera podrá dar amor a otros, sea muy perdonado, para que sea muy amado y pueda amar mucho a otros, bendiciones…

¡Comparte esta entrada, elige tu plataforma!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Un comentario