En el tiempo que Dios sacó a el pueblo de Israel de Egipto, Dios dio una serie de instrucciones a Moisés para que las llevara a cabo, entre ellas le dio medidas específicas para hacer un templo para adorar a Dios, este templo estaba hecho de tela ya que el el pueblo caminaba por el desierto, pero la intención de Dios es que este templo se edificara en piedra una vez que habitaran en la tierra prometida.

Dios fue muy claro en cuanto a las medidas y la distribución de este lugar, los materiales con los que estaría hecho y lo que ahí sucedería.

Hoy en día lo mas parecido a ese templo, físicamente sería una iglesia católica tradicional, ya que tiene un atrio que es donde el pueblo se congrega a ver a Dios, un lugar santo que es donde los sacerdotes se preparan para entrar en comunión con Dios y por último el Lugar Santísimo, que es el lugar detrás del altar, obviamente las proporciones de estas iglesias no tienen mucho que ver con las instrucciones específicas de Dios, pero nos dan una buena idea de como es que Dios lo planeó todo con respecto a el lugar físico donde se manifestaba.

El lugar que mas me llama la atención es el Lugar Santísimo, que según entiendo tendría una dimensión aproximada de 4×4 metros y era el lugar donde descendía la presencia de Dios, no cualquiera podía entrar en ese lugar, había un Sumo Sacerdote el cual entraba y tenía que estar 100% limpio y purificado para hacerlo, no solo en lo físico, sino en lo espiritual, en este lugar Dios hablaba con el Sumo Sacerdote, perdonaba el pecado del pueblo y daba instrucciones para que el pueblo las llevara a cabo.

Imagínelo, este lugar era tan especial que los Sumos Sacerdotes llevaban una cuerda atada a sus pies y una serie de cascabeles, por mientras estos sonaran, había la garantía de que seguía con vida y no había muerto a causa de su impureza, si dejaban de sonar, era una clara señal de que había muerto y usaban la cuerda atada a su pie para sacarlo de ahí.

Cuando pienso acerca de esto, me doy cuenta que por mucho que Dios nos ame y por mucho que anhele bendecirnos, las cosas de Dios son cosa seria y no podemos tomarlas a la ligera, Dios habita en todo lugar pero pocas veces estamos verdaderamente en su presencia y por ello muchas personas perciben a Dios como un Dios ajeno, porque pocas veces han estado en el estado de pureza para entrar verdadero contacto con Dios.

Al venir Jesús y morir por nuestros pecados, eliminó la necesidad de tener un Sumo Sacerdote que sea un intermediario entre nosotros y Dios, de hecho la Biblia describe que el velo que separaba el Lugar Santo del Lugar Santísimo se rasgó al morir Jesús en señal de ya no ser necesario, pero eso no eliminó nuestra necesidad de presentarnos puros y limpios delante de Dios para poder estar en su presencia y escuchar su voz.

Con esto no quiero mistificar a Dios y hacerle creer a usted que estar en la presencia de Dios es algo sumamente difícil y solo para algunos cuantos, todo lo contrario y se lo quiero explicar:

Hace una semana desayunaba con un buen amigo en Morelia quien me comentaba acerca de un tweet (un comentario de tweeter) del Pastor Rick Warren que decía que el Lugar Santísimo de nuestro cuerpo es nuestra mente, cuando lo mencionó, automáticamente vino a mi memoria el hecho de que nuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo según la Biblia y este comentario empezó a hacer sentido.

Nuestra mente es nuestro lugar mas íntimo y al que solo nosotros tememos acceso, lo que ahí sucede nadie lo sabe a menos que lo expresemos por medio de nuestras palabras y es lo que gobierna nuestros actos y nuestra vida cotidiana.

Si entendemos que nuestra mente es el Lugar Santísimo de nuestro cuerpo, nos damos cuenta de la gran necesidad de creer que tenemos y que todo aquello que no creemos y no entendemos de Dios, no ha llegado a esa mente y por lo general no llega ahí porque nuestra mente no esta en condiciones de recibir esa presencia de Dios, no esta limpia, no esta impecable y no me refiero solo a nuestra condición pecaminosa, sino que muchas veces nos acercamos a Dios o pretendemos hacerlo con miles de pensamientos, temores, culpas, incredulidades, rencores y que se yo que mas y es como si pretendiéramos que Dios entrara en una habitación la cual esta llena de cajas desde la puerta y que todas esas cajas contuvieran material e información tan importante que no pudiéramos sacar ninguna de ellas y que a su vez no permitieran que Dios pudiera tomar control de lugar o siquiera sentarse cómodo.

Una de las cosas que mas me ha emocionado aprender en mi caminar en Cristo, ha sido eso, que a Dios no lo necesitamos sentir, ya que ese parece ser el requisito de muchos para creer en El, a Dios tenemos que darle entrada a nuestra mente, tenemos que creer primeramente que es El quien es el autor de su palabra, que verdaderamente es todopoderoso como para asegurar su integridad y que todo lo que en ella esta escrito es verdad, sin cuestionarlo, sin tratar de explicarlo simplemente creerlo.

Por tanto el comentario del Pastor Warren hace mucho sentido, Dios ya no necesita un templo en lo físico para manifestarse, ni un Sumo Sacerdote que sea un intermediario entre El y nosotros, pero si requiere que nuestra mente este limpia, pura y clara para que El entre, habite en ella y podamos ser verdaderamente perdonados, transformados y llevados a aquel lugar y desempeñar aquel papel que El planeó para nosotros, pero requerimos de hacer un sacrificio, el sacrificio de creer para que podamos tener primero un culto racional a Dios antes de tener uno espiritual, solo así lograremos que El gobierne y bendiga nuestras vidas, como ve?.

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3 Comentarios

  1. rosy

    Muy buen tema, me quedo una duda de un tema que hablaste en una estacion de radio en Monterrey, dijiste que nosotros veniamos de otra parte, antes de que se hiciera la tierra, que aqui ya habia gente viviendo, como esta eso? no lo entendi me podrias platicar al respecto, espero tu respuesta.

    dtb, gracais

    • Rene Giesemann rosy

      Es sencillo, solo lee el libro de Génesis, cuando Adán y Eva fueron expulsados, la Biblia habla de que la tierra estaba habitada por gigantes, mas delante habla de que los hijos de Adan y Eva tuvieron hijos e hijas con los que habitaban la tierra, te recomiendo que leas todo el libro, ahí lo entenderás