Hace algunas semanas escribí acerca de mis amigos Jorge y Paty a quienes conocí en el tiempo que viví en el bajío y que su hijo sufrió un fuerte accidente quedando en coma por algunas semanas, ha sido sorprendente el saber como la salud de Derek ha mejorado ya que Paty desde Turquía nos reporta diario vía Facebook que es lo que pasa, me ha conmovido el ver como todos los que somos cercanos a ellos hemos confirmado nuestro apoyo en oración por ellos y como este apoyo le ha dado entereza a Paty para apoyar a su hijo y tratar de estar lo mejor posible en su estancia en aquel país desconocido y en esta situación que no se le desearía a nadie.
La situación de Derek ha mejorado considerablemente, según entiendo incluso algunas operaciones que le iban a practicar se han podido evitar y ya esta comiendo nuevamente de manera directa y no por medios artificiales, cuando leía esto no pude evitar el imaginar que es lo que pensaba y sentía mi amigo Jorge, se que por un lado emoción y alivio pero por otro lado debe de ser frustrante el no poder estar con su hijo y tenerlo a miles de kilómetros de distancia.
Sorprendentemente en el momento que pensaba acerca de ello, recibí un correo de el comentándome como esta y la necesidad que tiene de provocar algo desde acá que le de ánimo a Derek y hacerlo sentir la cercanía (emocional, fraternal, espiritual) de su padre y animarlo a seguir perseverando en Dios, ese mail me dejo perplejo, sabia que Jorge es un hombre muy cariñoso con su familia, lo vi en cientos de ocasiones, pero no me pudo dejar de impactar la manera como se expresaba que entendí perfectamente lo que pretende hacer y como a la distancia pretendida hacer algo especial.
La cita de hoy habla de ese amor que tenemos por nuestros hijos (los físicos y los espirituales), y nos confirma que no importa cuanto los amemos, y cuanto es demos, esto siempre será superado por Dios en gran escala, lo asombroso, es que a su vez todos somos hijos de Dios (una vez que decidimos dejar de ser solo criaturas de Dios) y podemos esperar esas grandes y asombrosas dadivas de parte de El, con esto me refiero desde la respuesta a la mas sencilla oración, como el milagro mas gran de y asombroso que nos garantice la eternidad.
En este día le quiero invitar a lo siguiente y espero se lo lleve de tarea para el fin de semana, así como Jorge ama a su hijo y pretende hacerle sentir amado desde la distancia, así Dios quiere hacer lo mismo todos los días con nosotros, pero desde la cercanía de nuestro corazón, por tanto le invito a que se deje amar por El, tome un momento vaya a un lugar donde estén solo usted y el Padre, póngase en la posición mas cómoda que encuentre, y empiece a hablar con Dios, pero tome también un momento de silencio, haga silencio por un rato y permita que Dios le hable de esas múltiples formas que lo puede hacer y le haga sentir amado y querido de esa forma sobrenatural e inexplicable que supere exponencialemte la manera en la que nosotros podemos amar a nuestros hijos.
Pase un buen fin de semana, pase un fin de semana en calidad de hijo, pase un fin de semana en brazos del Padre y cuando haya recargado pilas recibiendo, regrese el lunes con gran animo a hacer su voluntad y a expandir su reino.