Mateo 18:3 (Reina-Valera 1960)
y dijo: De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.
El pasado viernes fue un día muy especial, ya que en México se celebro el famoso «Día del Niño», que como tal puede no tener nada de especial en si, sino que me llamo mucho la atención el especial énfasis que mis amigos de Facebook le dieron a ese día, poco a poco conforme fue pasando el día, note que iba aumentando el numero de personas que iba cambiando la foto de su perfil por una de ellos mismos cuando eran niños y para la tarde estaba plagado de niños de corazón en la red social, normalmente disfruto mucho de esa pagina, pero le aseguro que el viernes lo disfrute aun mas.
Cuando vi la actitud de las personas en la red, no pude evitar contagiarme del animo que tenían y pensé de inmediato en poner una foto mía de cuando era niño, pero a su vez pensé en mejor en tomarme una foto con mi WebCam teniendo una actitud de niño y eso hice, y fue muy divertido!, el titulo de mi foto decía algo así como «divirtiéndome como niño» muchos de mis amigos comentaron en ella, ya que asentían acerca de mi actitud.
Conforme pasaba el día había algo dentro de mi que tenia la necesidad de hacer parte de esta celebración a Dios y como es muy común una de las primeras citas que vienen a la mente de las personas el 30 de abril es la famosa escena de Jesús pidiendo que dejen a los niños acercarse a El, y fue en ese momento que vino a mi mente una imagen clara, clarísima que me paralizo, recuerdo perfectamente la imagen de mi niñez cuando en la iglesia el Padre en misa invitaba a la comunidad a tomar la inocencia y la actitud de niño para poder acercarse a Dios y lo único que recuerdo ver son caras de solemnidad, que susto!, perro es cierto!, cada vez que pensamos en algo que tenga que ver con Dios, siempre aun las cosas que podrían ser divertidas las convertimos en algo solemne y aburrido, lo cual no hace mas que alejarnos mas de Dios o simplemente mas difícil de disfrutar.
Así que me di a la tarea y escribí la siguiente frase en mi perfil de Facebook: «La Biblia nos enseña que para entrar en el reino de los cielos, tenemos que volvernos como niños, eso nos asegura que debe de ser un lugar muy divertido!».
De inmediato vi la reacción de las personas en la red, la frase les hizo pensar y se dieron cuenta que la actitud que tomaban ante Dios no era siempre la adecuada, de hecho conozco muy pocas personas que realmente disfruten de su tiempo de oración, por lo general es algo serio, pero pocas veces divertido, conozco pocas personas quienes me hayan contado que se rieron en su tiempo con Dios, por lo general siempre regresan diciendo que encontraron paz y esto lo atribuyo a que en su tiempo de intimidad con Dios tuvieron oportunidad de desahogarse, pero no puedo garantizar que hayan tenido un verdadero dialogo con el Padre.
Este lunes comienzo de semana quiero invitarle a lo siguiente, quiero que quite esa cara de solemnidad que pone cuando piensa en Dios, quiero pedirle que cambie su manera de orar y estar en presencia de Dios, no lo va a lograr a la primera, pero le aseguro que si se esfuerza un poco, aprenderá a disfrutar mas su presencia, su favor y aprenderá a ser ese pequeño en brazos del Padre el cual salga con una gran sonrisa de haber estado con El y de haber pasado un rato divertido con el Dios que le amo primero como los Padres aman primero a sus hijos.
Rene Giesemann
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