1 Pedro 5:8 (Nueva Versión Internacional)
Practiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar.

Este fin de semana aprendí algo interesante y tengo días con la intención de compartirselos, no se que tan frecuentemente hayan escuchado o leído la cita de hoy, pero en los pasados años la he escuchado bastante, y siempre la he entendido como una advertencia y alerta de que nuestro adversario anda ahí, pero el sábado me quedo mas que claro.

Leon Atacando

Leon Atacando

El termino León rugiente es algo que no me terminaba de cuadrar cuando leía esta frase, ya que se que «el diablo» o como le llame usted es el príncipe de este mundo y es su deseo el atraernos hacia su reino y alejarnos de Dios, pero por que lo haría como león rugiente?, cuando me explicaron los métodos de casa del león lo entendí:

En la savannah donde habita el león, el alimento pasa frente a sus narices todo el tiempo, solo que su instinto le anima a casar presas difícil y le ha levado a desarrollar una técnica, ya que una de las cosas que le gusta hacer es cazar presas mas grandes a su tamaño, por tanto lo que hace el león cuando localiza una presa, empieza a caminar en grandes círculos y con gran paciencia alrededor de la presa y empieza a rugir desde la lejanía, al dar vueltas en círculos y rugiendo desde varios puntos de este circulo, poco a poco se va acercando mas, da la sensacion a la presa de que esta rodeada de leones y termina paralizada por el pánico y es entonces facilmente apresable por el león sin generar un mayor desgaste físico por la persecución.

Al entender este método de caza, entiendo perfectamente la cita del día de hoy, obviamente nuestro adversario usa las diferentes tentaciones para atraernos, pero usa dos herramientas muy especificas para acosarnos y asustarnos, son la culpa y la condenación, cuando hacemos algo que no es agradable a los ojos de Dios, tenemos la oportunidad de ir a la presencia de Dios y ponernos a cuentas como esta escrito en la palabra, y así como promete Dios, estas acciones serán olvidadas por Dios y enviadas al fondo del mar, mas el que no quiere que las olvidemos es nuestro adversario, quien empieza a recordárnoslas desde lejos y dando vueltas alrededor de nosotros hasta que la culpa o la condenación nos tienen paralizados y nos hacen creer que no somos dignos de estar en la presencia del Padre y nos alejan por completo de El, siendo que El ya las olvido y las perdono, ya que pago por ellas antes de nosotros nacer, en el momento de derramar su sangre en la cruz.

En este día le invito a reflexionar sobre aquellas cosas que le acosan, a darse cuenta que no esta rodeado de problemas o bien que no hay un grupo de leones alrededor de usted, sino que es uno solo que al ser maspequeño que lo que Dios ha puesto en su corazón, solo le esta pretendiendo intimidar y le quiere paralizar, no se deje!, tome cada una de las promesas de la biblia y hagalas suyas, salga adelante no porque lo merece sino por la misericordia de Dios, y no deje que nada le culpe ni le condene.

Rene Giesemann
giesemann@gmail.com
Página en Facebook

Rene GiesemannRene Giesemann
¡Comparte esta entrada, elige tu plataforma!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *