¿Ha escuchado la frase de «nuestro cuerpo es el templo del Espíritu»?, creo que asintió usted con la cabeza, ahora le pregunto, ¿sabe lo que realmente significa esta frase?

He escuchado todo tipo de respuestas a esta pregunta y la mayoría se basa en que también es parte de nuestra obligación el cuidar nuestro cuerpo ya que en el vivimos y es una manera de glorificar a Dios, aunque a veces me parece una respuesta muy trillada y hasta cierto punto mas aprendida que razonada.

Porque la pregunta no va en relación hacia el cuerpo, sino hacia el Espíritu, ¿cual es el Espíritu que mora dentro del cuerpo que no cuidamos tan bien como deberíamos?, tal vez como no sabemos que Espíritu es ese, no cuidamos su templo, ¿no lo cree?, por que si decimos (a veces mas de labios para afuera que con la conciencia de que es verdad) de que amamos a Dios con todo nuestra alma, con todas nuestras fuerzas y con todo nuestro ser, medito en lo siguiente, el Dios del que hablan no debe de ser muy importante, por que si observamos detenidamente la condición de nuestra alma, de nuestro cuerpo y el empeño que ponemos en querer a ese Dios del cual hablamos, debemos de estar queriendo a un Dios que no es del todo bueno o es un Dios medio pobre o algo así, y se lo voy a explicar:

Ayer escribía a una persona de Monterrey acerca de esto: los ojos son la ventana del alma, por tal, lo que nuestros ojos ven, es lo que alimenta lo que hay dentro de nosotros, es decir, si nos la pasamos viendo cosas no edificantes en la TV, en Internet o simplemente dedicamos parte de nuestro día viendo a las personas de nuestro alrededor con intenciones obscenas, pues imagine de lo que esta alimentada esa alma, y ¿es con esa alma con la que ama a Dios?, o bien, si nos la pasamos comiendo comida chatarra y poniendo en riesgo nuestra salud, ¿es con ese cuerpo (ser) que amamos a Dios?, y si no tenemos fuerza de voluntad de hacer lo correcto para alimentar nuestra alma con lo bueno y nuestro cuerpo de igual manera, ¿con que fuerza vamos a amar a Dios? (wow, ahora hasta yo me siento mal).

Pero no es importante el hecho de que no hacemos lo correcto, sino que no lo hacemos por que no estamos consientes del Dios que tenemos, no le conocemos, por tanto no le damos la importancia adecuada, es decir no tenemos un templo adecuado por que no conocemos al Dios adecuado, ¿le hace ciencia?

Muchas personas tienen creencias que les fueron «inculcadas» o en otras palabras creen en lo que alguien mas les dijo, sus padres, otras personas o bien sus lideres espirituales, pero hasta no compararlo con la palabra de Dios y en verdadera oración e intimidad con Dios no lo podrán saber.

Los que saben del tema dicen que el secreto de cualquier construcción esta en los cimientos como les decimos en México o bien los fundamentos, si estos no son los adecuados, lo que construyamos corre el riesgo de no ser un lugar seguro para habitar o se pueda desplomar, así es nuestra fe, si nuestro templo no esta construido sobre el fundamento de Cristo, pero no Cristo el cómodo que solo nos quiere, sino aquel que nos demanda el primer lugar en todo, nuestro templo corre el riesgo de no ser un buen lugar para habitar o que en algún momento se desplome, es ahora cuando entiendo que la gente se enoja con Dios y le da la espalda, no es que Dios no les escuche, solo que cuando construyeron su templo, no lo hicieron un lugar seguro para habitar, aun así Dios quiere entrar y ver como nos puede ayudar, solo que algunos olvidaron dejar un espacio para la puerta en ese templo!

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