¿Le ha sucedido que hay días en los que piensa que no debería de levantarse, días en los que su pasado le abruma demasiado, en los que su presente no pareciera tener sentido y que su mente le acosa de manera que no puede descansar?, créamelo, he estado ahí.
Muchas veces creemos que merecemos los malos momentos a causa de nuestro comportamiento y nuestras actitudes, o bien pensamos que Dios nos esta castigando, pero la realidad es que somos mas duros con nosotros mismos que Dios y le voy a explicar por que:
Dios sabia que cuando nos creaba que tendríamos una tendencia a fallar, pero como su creación nos amaba demasiado como para desecharnos, por ello, desde antes de crearnos designo a una parte de si (Jesucristo) a que viniera después de un tiempo a morir por nosotros y pagara por nuestros pecados, por tanto quiere decir que aun antes de que el primer hombre pusiera un pie en la tierra y aun antes de que se cometiera el primer pecado, Dios ya estaba dispuesto a perdonarlo y había puesto una solución a ello.
Obviamente esto no nos da pie a que pequemos libremente, al fin y al cabo que Dios ya estuvo dispuesto a perdonarnos, esto nos da la oportunidad de empezar desde cero y empezar de nuevo a experimentar los beneficios de hijos, es decir, recuperar el lugar que El designo para nosotros, haciendo nuestros pecados blancos como la nieve y recuperando la condición de Cristo.
La intención del mensaje de hoy es el invitarle a olvidarse de esa pesadez que le acosa, tómese un momento a parte y platique un rato con Dios, reconozca su pecado o sus actos indebidos y reconozca que no puede hacer nada para remediarlo, pero que Cristo si, y que una vez que se arrepienta de corazón y Dios le perdone, simplemente quedaran en el pasado, asi como Dios olvida nuestro pecado una vez que lo perdono, asi también lo debemos olvidar nosotros para que no nos acose.
Este día le invito a reaprender a disfrutar el favor de Dios a vivir en victoria y no permitir que nada se interponga entre usted y la bendición que Dios tiene preparada para usted, en cuanto a su pecado, Dios ya sabia que lo cometería, por ello le perdono por adelantado.