Diariamente recibo muchos correos de las personas que leen este devocional y me edifico con la mayoría por que en todos hay un común denominador, el anhelo de que Dios haga algo en sus vidas y las transforme.
Lo interesante de que Dios trate con nosotros es que lo hará siempre a su manera ya que lo primero con lo que tratara es con nuestra paciencia, esto no quiere decir que pueda tardar, por el contrario, pero si quiere dejar claro que las cosas El ya las previo desde el principio de los tiempos y que conoce mejor que nosotros que es lo que necesitamos, El espera que nuestra confianza este 100% puesta en El aunque no veamos claro como una situación saldrá avante.
La cita de hoy nos invita no solo a confiar sino a estar quietos, no a orar con desesperación sino a guardar silencio y disfrutar de su compañía, de su amor durante el proceso y declara que al final siempre será exaltado en la tierra.
Una situación muy similar sucedió en la cruz, todos o la mayoría de los que estaban presentes esperaban que Cristo demostrara que era Dios en un acto sobrenatural en el que bajase de la cruz y acabara con sus opresores, mas sin embargo no quería hacer justicia con los pocos que le querían matar, sino quería asegurar que el efecto de su muerte fuera tan trascendental como la salvación de toda la humanidad.
Asimismo Dios quiere darle soluciones trascendentales y que tal vez no tengan que ver con lo que usted imagina, esta esperando a que usted calle y confíe en El, le aseguro que cuando todo parezca perdido, El hará las cosas de una manera tan especial que no quedara duda de que fue El quien lo hizo y lo hizo para su hijo(a) amado(a).
Le invito a quedarse quieto en la presencia de Dios disfrute y déjese consentir en este día.