La cita del día de hoy habla de cuando Dios envió a Samuel a ungir a David como Rey sobre Israel y como lo había escogido a el, siendo el menor de los hermanos y siendo solo un muchacho de edad de 15.
Cuando reflexionaba sobre esta palabra recordaba como en la vida nos pasan cosas que muchos pueden juzgar que no las merecemos y que no hemos hecho lo suficiente para obtenerlas o bien que ni siquiera tenemos la edad o posición para obtenerlo.
Lo interesante es que Dios sabe todo esto y El no ve nuestras obras o nuestra situación actual, el ve lo que hay en nuestros corazones y decide ya sea bendecirnos o disciplinarnos de acuerdo a lo que encuentra dentro de el.
No hace falta ir a un adivino para saber nuestro futuro, si tomamos como base la cita del día de hoy, y recurrimos a la Biblia que dice «de lo que abunda en el corazón, de ello habla la boca», y analizamos lo que hablamos durante el día, con ello sabremos que es lo que Dios ve en nosotros y cual sera la respuesta a nuestras oraciones y necesidades.
Le invito a que cuide su corazón para que Dios se agrade de usted y le bendiga constantemente, para ejemplificarlo le citare el ejemplo que me dio un Pastor hace tiempo:
Mi objetivo en la vida es tener un corazón tan agradable a Dios que si por algún motivo, El llega a tener un refrigerador en el cielo, mi fotografía este pegada con un imán en una de sus puertas»