Muchas personas se cuestionan todo el tiempo como pueden tener una mejor relación con Dios, muchas personas se preguntan que necesitan hacer para lograr el favor de Dios y muchas personas se preguntan que hay que hacer para ser “bendecidas”, y rara vez llegan a la respuesta que tanto anhelan, y no es porque la respuesta no llegue, ni es porque Dios no responda, la mayoría de las veces es porque las personas no dejan de preguntar, aún cuando la respuesta se les ponga enfrente, ya que no tienen claro cual es el objetivo, solo quieren que algo les suceda, para poder creer en ese algo y seguirlo.
Esto que le cuento, suena rudo, muy rudo, pero es algo más que común y es algo más que real, se nos ha enseñado a que debemos de tener fe y ese tener fe, muchas veces pareciera mas una prueba de resistencia que algo provocado por Dios, es decir, nos enseñan que tener fe es aferrarse a una idea y no dejar de persistir en ese algo y no dejar de decirlo, pedirlo y anhelarlo hasta que se cumpla, siendo que Dios en lo absoluto nos ha dicho que las cosas funcionan de esa manera.
Para poder tener fe en algo, se requiere de una cosa muy importante, que previamente haya sido hablada por Dios, la misma Biblia lo declara (Hebreos 11:1), es decir, podemos creer y perseverar en todo lo que Dios ha dicho, ya que lo que ha salido de la boca de Dios tiene siempre un común denominador, tiene un propósito, es decir nos lleva a algún lado relacionado con su Reino, es decir, no solo nos beneficia a nosotros, sino que hace que su Reino crezca y a nosotros parte de ese Reino, y sé que muchos pensarán que es bueno para el Reino de Dios que tengamos un coche nuevo, ya que hace lucir bien a Dios, pero en muchas ocasiones ese “lucir bien”, no va de acuerdo a nuestro propósito.
Por favor no vaya a creer que es mi intención el que le quiero complicar la existencia y que las cosas de Dios son ajenas y lejanas, todo lo contrario, he aprendido que una vez que dejamos de centrar nuestra relación con Dios en nosotros mismos y la enfocamos en Él, todo se convierte en algo mucho mas sencillo, ya que los beneficios y las cosas que nosotros necesitamos se convierten en algo pequeño y en algo obvio, Dios se ocupa de nuestras necesidades en el momento que nosotros nos ocupamos de su Reino y empezamos a trabajar para Él sin importar en que área nos desenvolvamos y en que área seamos de influencia.
Como se empieza?, uf, es sencillo de decir, pero difícil de hacer, pues normalmente solemos vivir encerrados en nuestra propia mente y en nuestras propias necesidades, de modo que vivimos en un pequeño mundo que gira alrededor nuestro y que se enfoca en lo que sentimos y en lo que pensamos, y hay palabras que se convierten en comunes, pero no dejan de ser ajenas como la palabra “prójimo” que siempre han estado ahí, pero que no sabemos como interpretar.
Hace un par de días comentaba con alguien que existen dos tipos de amor, el amor sentimental y el amor racional, el primero es el que sucede cuando algo o alguien provoca un sentimiento en alguien mas y no podemos evitar el sentir algo favorable para con ese alguien, el segundo, tiene que ver con el hecho de conocer a esa persona e independientemente si nos gusta o no nos gusta lo que vemos y lo que aprendemos de ese alguien, tomar una continua decisión de amarle y beneficiarle con nuestra amistad y con todo lo que somos.
Si lo piensa detenidamente, ese es el amor que Dios tiene por nosotros, un amor racional, en el que todo el tiempo Dios decide amarnos y todo el tiempo decide hacer que su sangre derramada en la cruz tenga un propósito y que podamos vivir a un nivel que normalmente no merecemos, pero su amor hace que suceda, así debemos de aprender a vivir, decidiendo constantemente amar a otros sin importar si lo merecen o no lo merecen o si han hecho algo para que les amemos o no lo han hecho, es justo en ese lugar y en ese momento donde se hace verdad el mandamiento de amar a nuestro “prójimo” como a nosotros mismos, así como nosotros somos objeto de la decisión de ser amados sin merecerlo, así tenemos no solo la capacidad, sino la responsabilidad de amar a otros, por medio del conocimiento de ese alguien y la decisión firme de beneficiarlos con lo que hay en nosotros para poder compartirlo con ese “prójimo”.
Anoche tuve la oportunidad de ver de nuevo la película de “una Aventura extraordinaria”, que trata del naufragio de un barco y solo sobreviven un chico y un tigre de bengala en un bote salvavidas, y el mismo muchacho relata que su vida comenzó a tener sentido cuando se dio cuenta que era responsable de la vida del tigre, aún cuando este nunca demostró ser su amigo y aun cuando en cualquier momento el tigre hubiera podido usar al muchacho como su almuerzo, aún cuando esto significara su fin, y el muchacho empezó a vivir para el tigre y sus fuerzas las obtenía de la necesidad de proveer para el tigre, y lo mejor de todo, fue por medio de esa consciencia que conoció al verdadero y único Dios y aprendió a tener una relación con Él, ya que lo único que hizo durante los 227 días (creo que dijo que fueron 227 días), fue imitar el ejemplo del Dios que aprendió que fue el único vivo y el único con el cual podía tener una relación cuando nada más hacía sentido.
La cita de hoy habla de ello, a lo mejor le puede sonar un poco extremo el decir “dar la vida por un amigo”, pero que no es como morir a nosotros mismos el decidir a favor de alguien mas cuando sabemos que tenemos necesidad nosotros también?, la decisión puede significar muerte, pero el acto provoca vida en potencia, ya que vive el que se beneficia de nuestra decisión y se cumple la promesa de Dios (la que Él dijo y Él habló) de que habrá vida en aquel que muera por alguien más, de manera de dejamos de sobrevivir y empezamos a vivir con un propósito cada vez que decidimos quitar la vista de nosotros mismos y decidimos vivir como el muchacho de la película vivió, o como Dios nos pide, y nos garantiza una vida no solo buena, sino plena.
Wow es cierto, generalmente pensamos que el amor es una emoción del momento y que cuando esa emoción se va ya no decido amar a esa persona y busco a alguien mas que me de amor, pero pocas veces damos amor desinteresado y mas racional, que es el amor que Ds nos pide dar.
Gracias me has retado¡