Muchas personas tienen la idea de que la fe es algo que Dios nos da para poder creer en Él, y que dependiendo de lo que merecemos es la fe que nos da para creer, otras personas dicen tener fe en que Dios les ayudará, pero su fe se basa mas en sus necesidades que en Dios mismo, es decir, es como una manera de aferrarse a algo esperando que Dios lo haga y como esta fuera de su alcance y de sus manos, pues no les queda mas que tener fe, otras personas simplemente no entienden lo que es fe y les es difícil tenerla, ya que no tienen un punto de referencia.
La Biblia nos habla mucho acerca de la fe, primeramente nos dice que es la certeza de lo que se espera y la convicción de lo que no se ve (Heb 11:1), luego nos dice que sin fe es imposible agradar a Dios (Heb 11:6), pero también nos aclara que la fe correcta viene solamente por medio de oír y conocer la palabra de Dios (Rom 10:17).
Cuando me refiero a la fe correcta, quiero decir que existen muchos tipos de fe, ya que el mundo espiritual es mas que real y la misma Biblia dice que nuestro adversario, Satanás o como quiera usted llamarle, tiene facultad de hacer milagros y prodigios e incluso puede disfrazarse como ángel de luz (2 Cor 11:14), es decir, puede disfrazarse de algo que parece bueno y puede hacer milagros incluso, sanidades y todo tipo de maravillas con tal de que nos desviemos del propósito de Dios y creamos en algo distinto a lo que Dios pretende que creamos para que vivamos eternamente.
La cita de hoy es un pasaje que nos enseña varias cosas, primeramente nos habla sobre la libertad que Dios pone en nosotros, es decir nos da el libre albedrío para que tomemos decisiones, obviamente con sus respectivas consecuencias, pero a su vez nos dice que si creemos lo correcto, no habrá límite para lo que pueda hacer en nuestra vida.
La cita de hoy tiene lugar con 2 ciegos quienes siguieron a Jesús y le pidieron una y otra vez que les sanara, lo interesante del asunto es que les preguntó si verdaderamente creían que Él lo pudiera hacer, a lo que respondieron que si, en otras palabras Jesús lo que quería saber si en realidad estaban conscientes de con quien estaban y si en realidad deseaban que Jesús les sanara o si solo buscaban ser sanados sin importar quien fuera el autor, algo que lamentablemente no es algo fuera de lo común.
Note como Jesús les bendice y les aclara “conforme a vuestra fe sea hecho”, es decir, si realmente creían en aquel que estaba frente a ellos, aun sin haberle visto, este les sanaría, pero si no era así, otro tendría que hacerlo.
Nuestra fe tiene que ver con algo de lo cual tenemos conocimiento, no podemos creer en nada que no conocemos, es decir, podemos que creer en Dios porque le conocemos o en lo que querramos creer, es por eso que a muchas personas les es mas fácil creer en ídolos e imágenes a quienes ven y no en un Dios a quien no ven, les es difícil entender que Dios es un Dios celoso y que no está dispuesto a compartir nuestro corazón con nadie, porque eso menguaría su efecto en nosotros.
Es así de sencillo, hay personas que hacen sacrificios y cumplen mandas a su dios y dicen creer en el mismo Dios que el resto, siendo que el Dios de la Biblia (y todas las Biblias dicen lo mismo) aborrece los sacrificios, lo que sucede es que en realidad no tienen fe en el mismo Dios, o bien aquellos que tienen una doble vida y creen en un dios perdonador que todo lo pagó en la cruz, pero que en realidad nunca les lleva a un cambio verdadero y nunca les lleva a vivir en verdadera santidad, simplemente no es el mismo Dios del cual habla la Biblia, y así sucesivamente, sin darse cuenta, cada uno tiene su propio dios de acuerdo a lo que le acomoda.
No me dejo de maravillar al leer el pasaje de hoy, si lo medito detenidamente, en muchas etapas de mi vida he creído en dioses que son hechos a mi modo y los que me hacen sentir cómodo o menos culpable según sea el caso, pero de la misma manera ha sido mi bendición, limitada y escasa en algunos casos, pero el día que decidí creer en el Dios de la Biblia, en el verdadero omnipresente en aquel que lo dio todo por mi y que esta dispuesto a compensar con creces mi entrega a Él, me encontré con aquel que antes de hacer cualquier otro milagro, hace lo mismo que en la cita de hoy, me regresa la vista para que vea la verdad y no siga confundido.
Usted puede creer en lo que usted decida, o puede creer en el único y absoluto Dios del universo, la decisión es suya, solamente tiene que estar seguro de lo que cree y para ello tiene que tener el conocimiento de aquello en lo que cree, por lo que le invito a que tome un tiempo de manera diaria y se familiarice con aquel que dice que es su Dios y no se detenga hasta que tenga la plena seguridad que el universo mismo esta a su alcance y que nada le detendrá de ser pleno y recibir todo lo que por gracia merece.
Hola René, me encanto este devocional del dia de hoy.
Como podemos recibir bendiciones ilimitadas? Cuando nuestra fe es como la de los ciegos que son sanados? O cuando creemos en lo que queremos y tenemos Fe en que algun dia Dios nos dará eso que deseamos?
La obediencia es la unica llave para desatar bendicion!