31 días de sabiduría, día 31

Esto me llama mucho la atención, ya que nos encontramos en la época electoral en México y lejos de que los candidatos hablen a su favor y traten de convencer al pueblo porque son cada uno de ellos la mejor opción para gobernar al país, dedican gran parte de su tiempo a desprestigiar a sus contendientes, todo parece que fuera una lucha de hacer destacar a quien es el peor en vez de tratar de hacer lucir al mejor, y esto es realmente lamentable.

El capítulo 31 del libro de Proverbios es el consejo que recibe el Rey Lemuel de parte de su Madre y en lo particular me llama la atención, ya que en la fe Judía según entiendo son las Madres las que forman a sus hijos y específico depende de una Madre que su hijo varón sea un hombre de bien y este capítulo habla de 2 temas muy especiales, primeramente su manera de conducirse y segundo acerca de lo que debe de buscar en su mujer, en otras palabras, habla del gobierno que habrá de establecer.

Me emociona el hecho de que la Madre del Rey Lemuel le da la receta perfecta para llevar a cabo un gran reinado, y esto se basa en 2 cosas principalmente, el usar su boca para hablar justicia y el tener a la mujer idónea a su lado, que tenga una identidad clara de quien es y cual es su papel para complementar a su marido.

Esto es sumamente importante, ya que el capitulo 31 comienza con hablar justicia y luego describir a la mujer virtuosa, es decir a la esposa ideal, y empieza con un “oh mujer virtuosa, quien te hallará”, es decir empieza por afirmar a la mujer con sus palabras, es decir, la misma boca que habla justicia para gobernar es la boca que afirma a su ayuda idónea.

No he tenido la fortuna de casarme aún, y aún así he tenido el privilegio de aconsejar a muchas personas acerca de sus matrimonios y uno de los consejos que suelo dar constantemente es el afirmar a sus parejas con sus palabras, es decir, destacara aquellas características que son buenas y agradables y declarar en oración aquello que saben que esta en sus parejas pero que aun no es activo o que se esta desarrollando, es decir, con sus palabras tienen que formar a el esposo o la esposa que anhelan, necesitan o quieren, así de sencillo, es parte de la justicia que ejercemos.

Esto que le comento no solo se limita al ámbito de la pareja, es para cualquier área de nuestra vida que deseemos gobernar, es por ello que primero debemos de usar nuestras palabras para evitar injusticia y posteriormente edificar a quienes están en nuestro entorno para que sean afirmados por la justicia que sale de nuestras bocas y puedan llegar a desempeñar el papel para el que fueron diseñados y necesitamos que desempeñen.

Siempre lo he dicho y lo seguiré diciendo, cada vez que nos vemos en la necesidad de despedir a alguien en algún trabajo, es un fracaso para el jefe y no para el subordinado, el jefe no supo hablar justicia, pero sobre todo no supo sembrar en su subordinado las palabras que le afirmaran y le llevaran a esforzarse a ser ese complemento ideal, así sucede en el matrimonio y en cualquier relación que requiera gobierno.

Es por eso que pasamos tantos problemas, porque quisiéramos que las cosas se nos dieran, pero no siempre estamos dispuestos a gobernar, la tierra es un gran ejemplo, a diario salen cientos si no es que miles de anuncios en la televisión y en la radio hablando de lo devastado que está el planeta, y de lo que deberíamos de hacer, pero pocos hacen o dicen algo a su favor, es por eso que no ejercemos un gobierno adecuado sobre el lugar que Dios puso en nuestras manos para que así hiciéramos.

Es por eso que hoy al acabar con esta serie sobre 31 días de sabiduría, no me queda mas que invitarle a que reflexione detenidamente sobre sus palabras, son palabras de justicia?, son palabras que afirman?, hay un celo en usted por las personas en su entorno?, sabiduría es saber usar sus palabras para gobernar adecuadamente y no tener que prescindir de nada o de nadie en el ejercer de ese gobierno.

Lectura del día de hoy: Proverbios 31