Como muchos de ustedes han leído en devocionales anteriores, en lo personal no soy amigo de frases como «Dios por algo hace las cosas», ya que en mi muy personal opinión es una manera de desentenderse de la responsabilidad que pudiéramos tener ante una situación o peor aun, nos podemos perder de una bendición preparada por el Padre que no nos la va a dar a menos que estemos preparados y atentos para recibirla.

Hay un dicho que muchos usan que reza «la esperanza es lo ultimo que muere», hay quienes lo entienden como la tabla de salvación ante algo que parece imposible, pero si vamos a la palabra de Dios y nos enteramos cual es la raíz de esta esperanza, no nos queda mas que asombrarnos, ya que la misma esperanza es resultado de la tribulación o bien de los problemas, tanto los cotidianos como los que van un poco mas allá.

La esperanza es la fe mas una acción (fe + acción = esperanza), tal como lo explica la cita de hoy, en vez de sentarnos a que Dios haga algo o tratar de entender que por «algo» Dios permitio que estemos en «x» o «y» situación , nos dice que la tribulación que viene de Dios o que Dios permite (mejor dicho) produce perseverancia, y le voy a explicar como es esto:

Normalmente en lo personal no me gusta tomar roles o responsabilidades de cosas que me van a atar o a comprometer a estar en ciertos lugares y horas, ya que por la naturaleza de mi trabajo, normalmente no me es posible cumplir, por estar de viaje, en juntas o cualquier otro tipo de compromiso que me va a impedir cumplir con lo pactado, ahora bien, si veo que algo vale la pena o en mi corazón esta el hacerlo, me comprometo, aun cuando se que tal vez no sea como espero o como quisiera, y es ahí cuando mi paciencia empieza a ser probada ya que muchas veces las personas toman sus compromisos a la ligera, y empiezo a tener la sensación que mi tiempo es desperdiciado y mi esfuerzo no apreciado, para mi eso es tribulación, imagine se, tengo la gran fortuna de vivir a unos pasos de la playa y en ocasiones pasan semanas que no piso la arena, aun estando todo el día en casa trabajando, ahora, cuando alguien compromete mi tiempo libre en vano, ya se imaginara!, pero afortunadamente para esas situaciones esta la palabra de Dios, primeramente dice que la tribulación (prueba, problemas, etc.) produce paciencia, y hay muchos que se quedan ahí (solo tratando de practicar la paciencia), pero lo que sigue es la perseverancia!, es decir la responsabilidad de hacer lo posible y aun lo imposible para que las cosas salgan bien, en mi caso, afortunadamente no soy alguien que se quede callado, siempre busco la manera de expresar, no mi frustración sino hacer notar la oportunidad de que las cosas se hagan como debe de ser y mas si pueden ser alineadas con la palabra de Dios, y no dejo de perseverar hasta que alguien en definitiva me pone un alto y me hace ver que estoy equivocado o bien que las cosas cambien su rumbo al favorable y conveniente para todos, recuerdo cuando empezaba a trabajar en la hoteleria, había muchos usos y costumbres en el hotel en el que empecé y había cosas que no funcionaban como debían y me esforzaba mucho porque fueran de otra manera, al grado que me gane el apodo de «Renecio Contreras» gracias a mi jefa y gran amiga Celia que lee constantemente estas lineas, mas el insistir en lo correcto (antes solo de acuerdo a mi entendimiento, pero ahora de acuerdo a lo que la palabra de Dios dice) mantenía viva en mi la esperanza (que es la antesala de la certeza) de que las cosas cambiarían.

Mi invitación en esta mañana es a que evalúe cada situación por la que pasa, se esta usted conformando con lo que le pasa y sospecha que «Dios por algo hace las cosas», o ¿ha buscado la respuesta a su situación en la palabra de Dios?, ¿esta aprendiendo a tener paciencia en amor a los demás , persevera en lo que es justo y correcto y tiene no solo esperanza sino confianza en aquel que realmente lo puede todo en que las cosas cambiaran su rumbo en cuanto usted haya aprendido su lección y haya puesto por obra aquello que Dios necesita que haga y aprenda?.

Por tanto es cierto, la esperanza es lo ultimo que muere, muere con el ultimo intento que hacemos por que las cosas salgan bien, muere con la fe y la acción que pongamos por que las tribulaciones y los problemas de nuestra vida pasen, muere cuando la dejamos morir, cuando dejamos de creer y hacer, o se aviva cuando creemos en el Dios vivo que no «por algo» hace las cosas sino con la intención de forjar nuestro carácter y prepararnos para cumplamos el cometido de imitar a Cristo como fue escrito en la Biblia.

¡Comparte esta entrada, elige tu plataforma!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *