Lo que les quiero platicar el día de hoy es parte de una predica que escuche de un gran Pastor, pero vale 100% la pena ya que tristemente es una actitud que tenemos diariamente y no nos damos cuenta.

La cita del día de hoy nos habla de las plagas que Dios envío sobre Egipto para que liberara al pueblo, y en este pasaje en especifico habla de la plaga de las ranas, es decir había ranas por donde quiera, no se a usted pero a mi se me hace difícil el imaginarlo, pero quiero pensar en ello como cuando vamos al basurero local y abundan las moscas por doquier, así, pero con ranas, sobre las mesas, las camas, las bateas, etc., cuando Moisés va con el Faraón le habla convencido de que Dios escuchara su oración y demostrara su poder para manifestar la autenticidad de su petición de liberar al pueblo de Israel, y  le pregunta que en que momento quiere que ore para que sea quitada la plaga, y me imagino que usted y yo contestaríamos «ahora mismo!» incluso ofreceríamos ayuda, ¿no?, pues el Faraón asombrosamente decide pasar una noche mas entre las ranas, ¡ridículo ¿no?!

Esta misma actitud tenemos usted y yo cuando sabemos que hay cosas que necesitan ser resueltas en nuestra vida, cuando sabemos que tenemos que tomar un tiempo y sentarnos a orar o a leer la Biblia, sabiendo que Dios nos hablara en ella y que la solución a nuestros problemas esta en ello, cuando pretendemos incluso que otros oren por nosotros, ¡sabiendo que podemos hacerlo nosotros y obtener las respuestas inmediatas del creador del cielo y de la tierra!.

¿Por que habría usted de querer pasar una noche mas en su misma situación?, por la misma razón que el Faraón decidió hacerlo entre las ranas, por apatía, a veces nos aprovechamos de que conocemos el corazón de nuestro Padre y sabemos que no nos dejara permanentemente en la situación en la que nos encontramos, ya alguna vez nos ha librado y preferimos salir «mediocremente» adelante, por favor no se ofenda, pero no hay otro termino para nombrar el hecho de que podríamos vivir como verdaderos reyes y dignos representantes de Dios y lo hacemos como el mas común de los plebeyos, ¿no lo cree?

Ayer mismo me toco experimentar el amor de Dios y las respuestas inmediatas a la oración, en cuestión de minutos Dios resolvió cosas que yo por meses había dudado hacer, todo por el hecho de tomar la actitud correcta y decidir no pasar una noche mas entre las ranas.

¿Cuales son las ranas en su vida? ¿No le son molestas? ¿Pegajosas?, ¿ruidosas?, ¿sucias?, ¡decida hoy el ser bendecido hoy!, tome un tiempo y reflexione sobre su situación, no solo piense en su problema y piense que lo encomienda a Dios, tome un momento, cierre su oficina, recamara o donde se encuentre póngase de rodillas, si nunca lo había hecho, es un excelente momento para su primer vez, y declare a Dios que esta dispuesto a hacer lo que sea para no pasar una noche mas en su situación, y que sabe que por sus propias fuerzas no podrá, pero que confía en que El le ayudara a hacerlo, y que usted estará atento a ser obediente.

¡Le deseo la mejor de las noches, hoy! ¡Ya que será su primer noche libre de ranas!, no dude en compartir conmigo los milagros que Dios hace diariamente en su vida, reciba bendiciones.

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