La Biblia nos enseña que hay oraciones que no pasan del techo, y muchas veces me preguntaba por que, he aquí una de las respuestas que recibi.
Ese día tomé una decisión, el tratar sobre todas las cosas ser justo, obviamente luego vino el primer obstáculo, no sabia como serlo, así que tome mi Biblia y busqué en ella todos los principios de justicia y por difícil que sean, trato, se lo prometo, trato de llevarlos a cabo en todo lo que realizo diariamente.
El día uno fue creo que el más difícil, por que Dios probó si lo que había en mi corazón era verdadero y no le puedo decir que pase victorioso la prueba, pero le puedo decir que la noche #1 fue la mejor, ya que por primera vez tuve la certeza de que mis oraciones iban más allá del techo, Dios había visto en mi corazón el anhelo verdadero de vivir en justicia, aunque ese día no me hubiera sido posible cumplirlo.
Hoy le invito a anotar esta cita en un lugar visible a usted, ya sea en una nota en el marco de la pantalla de su computadora, o en un lugar de su cocina o simplemente en un papel de su cartera, y ore para que Dios le enseñe a vivir de acuerdo a esta cita, recuerde siempre que los ojos de Dios estarán siempre sobre usted, pero sus oidos estarán atentos a su oración si cumple el requisito de tener un corazón justo