Dicen que soñar no cuesta nada y es cierto, pero si que hay de sueños a sueños, me asombra escuchar a personas que dedican parte de su tiempo productivo a soñar en lo que harían si tuvieran dinero, compran coches, casas, muebles, pagan deudas, recompensan a sus padres con una casa, o que se yo, y si verdaderamente hicieran cuentas, la cantidad de dinero con la que sueñan no les alcanza para todo lo que quieren y además, ¡aun no lo tienen y ya se lo han gastado!, ¿le ha sucedido?
Yo recuerdo bien mis tiempos de estudiante, mi hermano y yo teníamos que trabajar para ayudarnos en nuestros estudios ya que nuestra situación no era cómoda y lo que mi madre nos enviaba en ese entonces no era mucho ya que ella tampoco tenia mucho, mi hermano y yo solíamos sentarnos a la puerta de la casa donde vivíamos y soñábamos sobre lo que haríamos si pudiéramos entre ambos reunir cierta cantidad de dinero y vivir de una manera mas holgada, oh que tiempos!, y sabe, afortunadamente ese tiempo paso hace mucho y lo mas interesante, es que nunca nos dimos cuenta, de cuando pasamos por el tiempo que ganábamos aquello que sonábamos, por que encontramos un amor mejor que el amor al dinero y lo que podíamos conseguir con el, descubrimos el amor a Dios y el amor al trabajo.
Es muy fácil confundirse, el dinero es algo que mueve nuestra sociedad hoy en día, se nos ha enseñado que nos da estatus, tranquilidad y estabilidad, lo cual es una completa y total mentira, como dice mi Madre, los que tienen mas, solo sufren por cantidades mas grandes que los que tienen menos, pero todos sufren por dinero.
La cita de hoy en especial es una que me gusta, muchos la entienden solo parcialmente ya que piensan que aplica para aquellos que son avaros y que por tener mucho dinero se desvían por gastarlo de manera incorrecta y tener las amistades incorrectas, pero la cita es mucho mas trascendente que eso, ya que habla de que el amor al dinero es la raíz de todos los males, quiere decir que si usted ama al dinero y no lo tiene, empieza por sentirse mal, e incluso e escuchado a muchos que le han dado la espalda a Dios por que no les da el dinero que le piden, ese es el amor al dinero, ¡lo mas triste es que puede ser un amor imposible!.
Esta mañana yo le invito a hacer un cambio de mentalidad, que yo tuve la fortuna de hacer hace muchos años, trabaje no por tener dinero, trabaje por ser excelente y agradar a Dios, procure que todo lo que haga sea tan bueno como para podérselo dar a Dios en ese momento, ame a Dios por lo que es y no por lo que le da, usted se dará cuenta que tendrá una paz mas allá de su entendimiento, y no le puedo garantizar que tendrá mas dinero, pero si le puedo garantizar que los problemas que la falta de dinero le ocasionan, desaparecerán ya que es parte de la promesa de Dios.