Ayer por la mañana al despertar, de una manera inevitable tuve que pensar en un amigo de años y la bendición que ha sido a mi vida durante este tiempo, cosa seguida decidí bendecirle asi que temprano en la mañana me dirigí a su oficina y pegué una pequeña nota en su puerta orando para que Dios tuviera misericordia en su vida.
Un rato mas tarde platicábamos al respecto y me decía que por que deseaba misericordia a su vida, que si había notado que la necesitara y me tuve que poner a reflexionar sobre ello…
Cierto es que la misericordia de Dios es nueva cada día y que sin ella no viviríamos siquiera, pero va mas allá, la misericordia es parte del todos los días de aquellos que piensan el bien, no solo para si, sino para los que le rodean.
Muchas veces tenemos la falsa idea de que la misericordia es solo para aquellos que han pecado o son inmundos, y aunque somos pecadores y desafortunadamente no lo podemos evitar, es Cristo quien tiene misericordia de nosotros para que vivamos con El, y transforma aun nuestros pensamientos para que esa misericordia sea parte de nuestro todos los días, y aprendamos a vivir, comer, dormir y respirar de ella.
En su próxima oración pida por misericordia para su vida, Cristo entenderá esto y transformará su vida, sus pensamientos y la manera de bendecirle.